Ana Uzcategui | LA PRENSA de Lara.-Las denuncias de que la gasolina está siendo ligada con agua encendieron las alarmas en Barquisimeto esta semana, luego de que el martes conductores en la estación de servicio, ubicada en la carrera 19 con calle 12, reportaron fallas inmediatas en sus vehículos tras surtir gasolina.
«La cisterna de Pdvsa terminó de despachar a las 9:30 de la mañana y los carros que echaron gasolina en los primeros 15 minutos se apagaban saliendo de la bomba. El combustible estaba ligado con agua y por seguridad procedieron a cerrar la estación por ese día», contó una fuente ligada a la distribución de combustible.
Este sería el primer caso que se ha registrado en Lara de presunta gasolina contaminada. Los dueños de la bomba hicieron la denuncia ante el Ministerio de Petróleo para determinar si el combustible está siendo manipulado en la planta de llenado de Maporal, o el agua la contenían los tanques de esa estación de servicio.
Iván Freites, secretario de la Federación Unitaria de Trabajadores de Petróleos de Venezuela (Futpv-Pdvsa), informó que desde hace dos semanas en los estados Aragua, Trujillo, Táchira, Carabobo, Zulia, Mérida y Falcón se reportaron casos similares a los de Barquisimeto; es decir, conductores denunciaron que bombas venden gasolina ligada con agua.
El sindicalista asegura que esto se debe a que el Gobierno no está importando los aditivos requeridos para garantizar la calidad en la refinación del combustible.
«Hemos recibido denuncias de que la gasolina viene con agua y otros componentes que afectan a los vehículos. Que el combustible que se está importando desde Rusia de la empresa Rosneft, no pasa por los exámenes de laboratorio requeridos para determinar su calidad, y que se está distribuyendo una gasolina de 80 octanajes, aunque en los dispensadores le marque como si fuese de 91 o de 95», aseveró.
Freites explicó la falta de químicos en el país, como el alquilato que permite que la gasolina se refine con el octanaje adecuado y que solo están trabajando con los inventarios que quedan de reserva. Precisó además que de cinco refinerías que hay en el país, solo funcionan Amuay y Cardón, y los demás complejos como El Palito y Puerto La Cruz trabajan tan solo al 10 % de su capacidad instalada y no están procesando combustible.
Desde Futpv alertan los daños que esta situación está provocando a los vehículos de las personas, pues enseguida que un carro es sometido a una gasolina adulterada, con agua o residuos, registra bajo rendimiento del motor, daño del filtro de combustible, avería en los inyectores de combustible y repararlo puede salir muy costoso, incluso cobrados en dólares.