Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.- La recuperación del país con mercados de exportación se perfila hacia el interés agrícola, que puede aprovecharse con el apoyo del Estado que permita suprimir factores que limitan la producción. Así lo advierten desde Consecomercio, ante el potencial existente en Lara y en el país para activar la economía, con el soporte que garantice la producción y la haga sostenible.
Así lo explicó Antonio Molina, directivo de Consecomercio, ayer durante el foro «Exportar a las islas Aruba, Bonaire y Curazao. ¿Cómo hacerlo posible!?», convocado por Fedecámaras Lara y que resalta ese incentivo al sector privado, así como a los productores por la Venezuela competitiva para estos mercados porque más allá de la cercanía con el Caribe, se trata de activar la capacidad instalada que se ha mantenido subestimada.
«El apoyo del Estado debe ser en múltiples etapas, empezando por suministrar el combustible porque cuando falta genera frustración en los productores, quienes muchas veces tienen a sus tractores en largas colas de estaciones de servicios», lamenta esa realidad, considerando que se trata del sector primario de la economía.
También habla de la fortaleza agrícola por aprovechar, la consideración del tema de seguridad que incluye el acompañamiento en las vías, insistiendo en las alcabalas de funcionarios policiales como puntos de control. «Son tantos aspectos, donde también se exige que se trate de ser nacional en el cobro de las tasas y tarifas de salida de los barcos», señala, entendiendo que no se trata de un capricho, sino que Venezuela pueda competir con otros países en el mundo.
Resalta dicha exigencia para todo el sector agrícola, impulsado por el interés en la importación de productos venezolanos desde las islas caribeñas. Sólo toca enfocarse en tener la plataforma sólida, para ofrecer y cumplir con todos los requerimientos en calidad, tamaño y empaque. Molina confía en satisfacer las expectativas de los potenciales clientes, más allá de las islas hasta llegar a cubrir la demanda de los 28 países que conforman la Unión Europea.
Es un tema tan amplio que las exigencias pueden extenderse al interés por el carbón o demás agregados minerales, con miras a su exportación a las islas que además necesiten asegurar sus provisiones en el sector construcción.
Llegar y quedarse
Las expectativas siguen levantando el interés de quienes siguen apostando por el país. De hecho, Molina precisa que «Lara debe definir su oferta exportable que sea sostenible para rescatar la confiabilidad». Un hecho básico para las proyecciones a nivel nacional, al indicar que en abril de 2023 se empezó desde cero y se han tenido 5 mil toneladas de productos exportados. «Esperamos estar por encima de las 20 mil toneladas para 2024, principalmente agrícola», precisó.
Insiste en las capacidades de producción en tierra, donde Lara puede llevar la delantera y que aún presentando problemas de financiamiento, es posible que en algunas de esas islas brinden ese apoyo para el financiamiento. «Es un capital por crear, una gran oportunidad al ver más allá y apostar al Caribe próximo», considerando que simplemente por la condición de islas necesitan surtirse con productos agrícolas y de cualquier rubro.
Con optimismo, las ponencias en este debate descifraron las principales dudas de quienes están interesados en seguir invirtiendo en la nación. Una visión general y a manera de recordatorio para que las pequeñas y medianas empresas trabajen en función de nuevas oportunidades en exportación.