Leonellas Díaz | LA PRENSA.- “Sólo por hoy darán el retroactivo de aumento y retroactivo de bono que son 128 mil 416 bolívares, pero a partir del próximo mes sólo recibiremos 84 mil 500 bolívares, eso no alcanza para nada, debemos comprar medicinas y comidas, eso se va en un santiamén”, soltó el pensionado José Hernández, mientras hacía una cola kilométrica en el centro de Barquisimeto para poder cobrar su cuota del IVSS que tiene un nuevo valor tras aumento presidencial.
Quejas a granel lanzaban los abuelos mientras esperaban sentados o de pie que la cola avanzara. Unos decían que estaban a la espera de ser atendidos mientras calculaban en qué invertirían el dinero de su pensión.
“Alcanza si acaso para las medicinas que debo comprar, y si es que se consiguen. El sueldo debe ser de 200 a 300 mil bolívares mensuales, aunque es más lo que dura en el banco que en los bolsillos, porque se compra: queso, carnes y huevos; y se acabó”, explicó Juan González.
Carmen Molleja, mientras esperaba ser atendida en el banco Bicentenario dijo que esperaba que el dinero que cobrara le alcanzara para poder cubrir todas sus necesidades.
“En medicinas, carnes, pollos, verduras, frutas y aseo personal, se me va una gran cantidad de dinero y más que cuando no se consigue, mando a mis hijos a comprar bachaqueado, yo creo que sobrepasan los 150 mil bolívares, aunado a que de vez en cuando le doy 3 mil bolívares a mi nieta para que compre cualquier cosita que le guste, o un dulce; sé que no es mucho, pero como es la consentida de la casa, le aparto esos reales de la pensión”, relató la abuelita Etanislá López.
Adultos mayores que vienen de Sanare, Guarico y Humocaro comentaron que cada vez que llega la fecha para cobrar la pensión ellos madrugan para poder llegar. Dicen que se quedan en casa de sus hijos o cualquier familiar que resida en Barquisimeto para poder acudir a sacar sus reales.
“Aunque no es mucho lo que se cobre, agradezo tener ese dinero una vez por mes, peor es no tener nada; en la actualidad todo está costoso, no estoy de acuerdo con que aumenten la pensión y al día siguiente los productos también suban, es algo injusto porque somos una familia numerosa y hay que rendirlo”, dice Ana Pérez, pensionada.