Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- Como preocupante cataloga Monseñor Víctor Hugo Basabe, administrador apostólico de la Arquidiócesis de Barquisimeto, la crisis institucional que registra Venezuela desde este cinco de enero, cuando se juramentaron dos parlamentos, uno que ocupa el Palacio Federal Legislativo y que domina el gobierno con el 90% de los cargos, y otro que representan los diputados electos en 2015, quienes a pesar de la persecución judicial, defienden la continuidad constitucional hasta que en Venezuela se realicen elecciones libres. El Obispo sostiene que mientras ese conflicto de poderes se profundiza en la nación, los venezolanos padecen de hambre y sufren las peores calamidades económicas de la historia republicana.
«2021 es una año de muchas interrogantes, la única certeza que tenemos es que el país está en las manos de Dios, y que en buenas manos estamos. Lamentablemente seguimos teniendo una clase política que no está a la altura de las circunstancias, sumamente alejada de la población que está sufriendo, padeciendo muchísimo lo que es el daño de los servicios público, que está padeciendo profundamente el aumento en el costo de la vida, que está padeciendo ante una economía dolarizada de hecho. En un país donde la mayor parte de la gente lo que gana es un miserable sueldo», exclamó la máxima autoridad eclesiástica de Barquisimeto.
Basabe indicó que participará este siete de enero en la Asamblea Ordinaria Plenaria número 114 del Episcopado Venezolano que durará hasta el 11 de este mes, donde todos los obispos se reunirán y discernirán sobre la crisis social, política y económica de Venezuela, de acuerdo a la realidad que ven en sus parroquias, y después harán públicas sus conclusiones en un comunicado.
«Yo quisiera invitar a la dirigencia política a que entiendan que el país no está para soportar esta situación de crisis, por mucho tiempo y que o se ponen a la altura de la circunstancia o este pueblo terminará arrollándolos a todos independientemente del signo político que representen», soltó el cura.
En reiteradas ocasiones Monseñor ha sido frontal en sus declaraciones al manifestar el sufrimiento de los ciudadanos que han venido perdiendo sus derechos humanos en el país. El cinco de enero, durante la misa de la bajada de la imagen de la Divina Pastora en Santa Rosa, fue enfático al decir que «mezquindades políticas hacen que el país esté más empobrecido«.
A través de la organización Cáritas de Venezuela, la iglesia católica ha hecho públicas cifras alarmantes que reflejan que el 73% de los niños menores de cinco años en Venezuela, sufre de desnutrición aguda.