Isabella Delgado | LA PRENSA.- Para los docentes dependientes de la Gobernación de Lara, el ajuste salarial anunciado por el gobernador Henri Falcón el pasado viernes para el gremio es engañoso e insatisfactorio, lo asegura Manuel Galíndez, secretario de la Federación Nacional de Trabajadores de la Educación (Fenatev), en nombre de la coalición sindical.
Falcón, en la presentación de incentivos y el nuevo tabulador para funcionarios públicos que entra en vigencia el 1 de enero, aseguró que el gremio percibirá un aumento global de 230 %. El sueldo base de un docente V pasa de 7 mil 800 bolívares a 22 mil 800 bolívares.
Galíndez considera que la iniciativa, aunque le da oxígeno para el comienzo de año no cubre sus necesidades: “El cargo más alto que tiene hasta 38 años de servicio sigue quedando por debajo de sueldo mínimo (Bs. 27.092)”.
A su juicio, lo más grave es que el gobernador anunció pago de deudas, entre ellas la que mantiene con el fondo de Seguro Social, pero no fue incluida la homologación del sueldo de 2016, que incluyen los aumentos de sueldo mínimo de 20 % y 50 % aprobados por el presidente Nicolás Maduro.
Hoy, los docentes activos, desincorporados, jubilados y de Fundaescolar están convocados en una asamblea general en la plaza Jacinto Lara, en donde se discutirá el tema y se definirán próximas acciones.
Marcha por el Ipasme
Este jueves, los docentes estadales y los dependientes del Ministerio de Educación encabezarán una marcha desde el Instituto de Previsión y Asistencia Social del Personal del Ministerio de Educación (Ipasme) hasta la Defensoría del Pueblo para exigir la recuperación del instituto.
Expondrán que en el instituto no hay especialistas, equipos técnicos y ni siquiera convalidan reposos de pre y posparto. Los trabajadores del sector salud los acompañarán en la acción de calle.