Jennifer Orozco | LA PRENSA.- Uniformes decolorados, botas rotas y chalecos vencidos aquejan a los funcionarios de la Policía del estado Lara.
Cuando se les pregunta por el aspecto de sus uniformes repiten a una sola voz “no nos han dado dotación, ni la darán”. La nomina de los azules, que alcanza a más de 700 funcionarios, no confía en que le lleguen uniformes pronto.
La última dotación que recuerdan es del 21 de mayo del año 2014. En ese momento, debido a la presión y quejas anónimas de muchos funcionarios, la Gobernación del estado Lara destinó un presupuesto para uniformes y se les otorgó uno por cada policía.
Sin embargo muchos funcionarios denunciaron que la nueva Ley Policial, por la que se rigen actualmente, indica que el cuerpo le debe dotar de dos uniformes anuales a cada policía.
En 2014 teníamos casi tres años sin ver uniformes. Cuando los dieron eran de tallas grandes, uno solo por funcionario y además incompleto” asegura un oficial agregado de los azules.
Esa misma queja vuelve pasada una semana después de la celebración del día nacional del policía del 2016. Muchos pensaron que la dotación les llegaría antes del 16 de julio o el mismo día. Sin embargo, para presentarse en el acto de ascensos, muchos de ellos tuvieron que comprar o mandarse hacer uniformes “para no dar lastima” en la celebración.
De hecho, funcionarios de alto rango revelaron que el desfile de este año no se realizó pues los uniformes ni las patrullas estaban aptos para mostrarlos en un acto publico solemne.
A pesar de estar concientes de la situación, el ejecutivo regional asegura no tener presupuesto para resolver la problemática de la dotación. Erick Valles, secretario de gobierno del estado Lara asegura que la intención está dada, pero que el CLEL no ha cumplido con el paso del crédito necesario para cubrir la compra de uniformes.
“Los policías también están pasando trabajo como todos los empleados de la gobernación, de la alcaldía, públicos o privados. El Gobierno Nacional tiene que generar recursos para solventar el presupuesto”, expresó Valles.
Pero los policías se costean sus uniformes. Según un Polilara, el costo actual de una camisa azul, encargada a una costurera, es de 5 mil 500 bolívares lo más barato. Un pantalón de gabardina azul marino cuesta entre 14 y 18 mil bolívares. A ese pantalón les deben coser la franja roja de los lados y el metro de cinta está en 70 bolívares.
Las botas para motorizados alcanzan los 116 mil bolívares y unas botas de diario están alrededor de los 60 mil.
Los portanombre salen en mil bolívares el par y el forro del chaleco antibalas cuesta 32 mil bolívares. Un uniforme sencillo alcanza los 112 mil 640 bolívares, casi mil por ciento por encima de lo que es el salario regular de un oficial.
Si a uno le falta algo del uniforme o se presenta con uno en mal estado va una sanción, algo injusto porque la dotación debe ser parte de nuestros beneficios y no lo recibimos como corresponde”, protesta un oficial de la policía regional.
Muchos de ellos han tomado la opción de comprar wiki-wiki azul y pintar los uniformes, restaurar los forros de los chalecos antibalas en una empresa especializada en San José, mandar a coser y a pulir sus botas viejas o comprarle los uniformes a policías retirados.