Docentes afirman que el arte actúa como refugio y terapia
Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- «Mientras más niños y adultos sean artistas, tendremos un mundo mucho más empático, porque arte es unión y nos ayuda a pensar las cosas de manera más sana, menos tóxicas, dañinas o violentas», dijo María Valentina Hamm, directora del Estudio de Arte y Flamenco Alalá.
El sonido del taconeo, las niñas moviéndose de un lado a otro y sonriendo porque hacen lo que les apasiona, es para María Valentina Hamm, la base para mostrar el amor y hacer posible crear un mundo mejor.
A través de la pintura los artistas pueden expresar sus sentimientos y educadores pueden ayudar a los psicólogos a descifrar lo que les motiva a plasmar en el lienzo, así mismo ocurre con las melodías, la danza y el teatro.
Para María Elena Peraza, directora de la Escuela Martín Tovar y Tovar, los pedagogos se convierten en los aliados de los psicólogos, pues aunque no tienen la titularidad se percatan en cómo las expresiones artísticas liberan presiones y pueden ver cómo el estudiante refleja, por ejemplo, la violencia en sus dibujos y en el uso de tonalidades oscuras.
«El arte es sanación y es increíble como es una terapia para las personas con condición del espectro autista, en la escuela vemos a jóvenes que poco se comunicaban y ahora socializan a través de las artes plásticas», sostuvo María Elena.
Claudia Elena Riera, artista plástico, concuerda con la docente en que el arte es un escape y una manera de conectarse con los sentimientos.
«Esos pequeños van a ser adultos y si sembramos esa semilla de la sensibilidad, de apreciar las cosas y de cuidarlas contribuirán con una sociedad más sensible y responsable», comentó Riera.