Instagram prioriza la privacidad de los adolescentes con nuevas configuraciones

Instagram anunció su mayor intento hasta la fecha de proteger a los jóvenes usuarios de los peligros en su plataforma, implementando nuevas configuraciones de “cuentas para adolescentes” que automáticamente harán que millones de cuentas de adolescentes sean privadas y restringirán el tipo de contenido que esos usuarios pueden ver en la aplicación.

Las nuevas restricciones también están diseñadas para obligar a los adolescentes a adoptar la supervisión parental a través de la aplicación. Instagram aplicará automáticamente las nuevas configuraciones de “cuentas para adolescentes” a todos los usuarios menores de 18 años. Después de la actualización, los usuarios de 16 y 17 años podrán cambiar manualmente la configuración de la aplicación a sus preferencias, pero los usuarios de 13 a 15 años deberán obtener la aprobación de los padres para cualquier cambio.

Las nuevas configuraciones de “cuentas para adolescentes” se basan en más de 30 herramientas de bienestar y supervisión parental que la empresa matriz Meta ha implementado en los últimos años, como recordatorios de “tomar un descanso” y restricciones sobre contenido “inapropiado para la edad”,

A pesar de esas actualizaciones que ya fueron hechas en el pasado, la empresa ha seguido enfrentando críticas por colocar demasiada responsabilidad en manos de los padres y, en algunos casos, de los propios adolescentes.

La aplicación también agregará nuevas funciones a su herramienta de supervisión parental, permitiendo a los padres ver qué cuentas ha enviado mensajes recientemente su adolescente, establecer límites de tiempo diarios totales para el uso de Instagram por parte de los adolescentes, bloquear a los adolescentes para que no usen Instagram por la noche o durante otros períodos de tiempo específicos y ver los temas sobre los que su adolescente está viendo contenido.

Se espera que los cambios se realicen en todas las cuentas de adolescentes en Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y Australia dentro de los próximos 60 días, antes de implementarse en otros países a finales de este año y el próximo.