LA PRENSA.- La organización PETA logró introducir una cámara en los “laboratorios” donde desollan a los caimanes para ver el proceso de fabricación de «los accesorios de piel».
«Chain Louise GM. 12.600 dólares. Material: cocodrilo brillante». A simple vista, para cualquier mujer que quiera -y pueda- colgar de su hombro este artículo de lujo, podría resultar irresistible. Sin pensar demasiado en cómo fue hecho, este bolso de Louis Vuitton llegó a las más exclusivas tiendas del mundo gracias a que en Vietnam quienes consiguen las pieles sacrificaron a un caimán de la manera más cruel.
La organización de defensa de los animales (PETA) emitió un vídeo en el cual muestran el inicio del proceso en que estos artículos de lujo -que incluyen bolsos, cinturones, zapatos- son manufacturados. Las imágenes son dramáticas y dan cuentan de cómo los cocodrilos son tratados por quienes le sacan su piel… mientras aún están vivos.
Los lagartos están «echados sin moverse en miles de celdas minúsculas de cemento», explica la grabación que deja en evidencia la crueldad con que son tratados estos animales antes de ser torturados y ejecutados. Los trabajadores vietnamitas golpean con fuerza sus cabezas cuando ya están en «la sala quirúrgica». Semiconscientes, los colocan sobre una camilla metálica. Allí, uno de ellos introduce una larga varilla por su médula espinal y comienzan a desollarlos, cuando muchos de ellos aún se mueven.
«Un bolso de piel de cocodrilo significa que un ser vivo tuvo una muerte miserable y una muerte espantosa. PETA hace un llamamiento a todos a no comprar pieles exóticas, para impedir que los reptiles sean encarcelados, mutilados y desollados vivos», señaló la directora ejecutiva de la institución, Ingrid Newkirk.
*Con información de Infobae