EFE | LA PRENSA.- El Real Madrid alivió su crisis con un triunfo en Valencia (1-4), donde debió sufrir para lograr una victoria que encarriló con dos goles de penalti en el primer periodo ante un rival que le creó muchos problemas, sobre todo en el tramo inicial del segundo tiempo, pero al que sentenció en los minutos finales.
El partido estuvo nivelado en su fase inicial hasta que un contragolpe del equipo madrileño se resolvió con un penalti claro de Montoya sobre Ronaldo, quien puso el 0-1 en el marcador.
En un nuevo ataque del equipo madrileño, una acción entre Montoya y Benzema fue castigada con un nuevo penalti muy protestado, a diferencia del anterior, por el público. Ronaldo había hecho su primer gol con suavidad a la izquierda de Neto y ahora marcó con potencia a su derecha.
La entrada de Carlos Soler por Guedes provocó que el Valencia tuviera más el balón y antes del cuarto de hora llegó en 1-2 al cabecear Mina un córner sacado por Parejo que le dio más intensidad si cabe al encuentro.
El Valencia intensificó su dominio y el Real Madrid vivió sus peores momentos con Keylor Navas como protagonista ante el asedio total del equipo local, que dispuso de varias ocasiones de gol para empatar ante un rival desconcertado, aunque en una contra de Bale, Ronaldo tuvo cerca el 1-3 (m.68).
Cuando el encuentro entró en el último cuarto de hora, el dominio local ya no era tan intenso, pero el Real Madrid no encontraba la forma de verse superado por un Valencia incisivo y que arriesgaba en ataque.
Fue entonces cuando una acción por la izquierda resuelta por Marcelo de un disparo cruzado acabó con las esperanzas locales al batir a Neto por tercera vez.
El gol sentenció el partido, el Valencia bajó la guardia y el Madrid todavía tuvo fuerzas para ampliar el marcador con un buen gol de Kroos.