Luis Felipe Colmenárez | LA PRENSA DE LARA.- A punta de pico y pala. La espera desesperó a los vecinos que residen en la avenida principal del barrio La Peña, al oeste de Barquisimeto, quienes cansados de tener que lidiar con la fetidez y contaminación que se desprende de un colapso de cloacas decidieron realizar ellos mismos los trabajos correspondientes.
Hace cinco meses, las cloacas de la comunidad comenzaron a presentar problemas. Las casas en su interior comenzaron a ver cómo las aguas negras comenzaban a brotar.
Al ver lo que estaba ocurriendo las alarmas se encendieron y comenzaron a ver con preocupación lo que pudiese desencadenar semejante situación.
Muchas fueron las cartas y los llamados que hicieron a Hidrolara para que una cuadrilla se presentara en el lugar a fin de que pudieran constatar la situación de riesgo que estaban enfrentando.
«Aquí hay personas de la tercera edad e incluso una muchacha que acaban de practicarle una cesárea. No es justo vivir bajo este calvario», contó Maritza Linares.
Como un plan B, la colectividad recurrió a un vecino que en años anteriores laboró en la hidrológica a ver qué posibilidades había de que les echara una mano.
Fue así como el señor Juan Dorante, con la ayuda de dos compañeros, comenzó hace más de una semana con la tarea de drenar las aguas servidas. En medio de la calle comenzó a cavar grandes huecos y a hacer sondeos para concretar la obra.
Dorante comenta que la comunidad le paga con colaboración y alimentos; no obstante, afirma que lo hace por ser habitante del sector y sentirse comprometido por el bienestar de todos.