Lorena Rojas | LA PRENSA DE LARA.- Sin transporte público, sin agua potable por tuberías con constantes fluctuaciones eléctricas y con las vías internas deterioradas viven en la comunidad de Las Playitas, al norte de Barquisimeto, en el sector son al menos 300 familias afectadas.
Habitantes han tenido que resolver como pueden cada uno de los problemas que los aquejan, en el caso del transporte público cuentan que las únicas unidades que los dejan «cerca», lo hacen en la avenida Intercomunal Barquisimeto – Duaca, y se trata de vehículos que se dirigen a Duaca, de allí para llegar a sus viviendas optan por tomar una mototaxi que les cobra un dólar o por el contrario les toca caminar 4 kilómetros para poder llegar. También hay algunos que corren con la suerte de conseguir una cola cuando pasan los camiones a buscar las piñ;as para venderlas.
Gumer Torrealba, habitante del sector, asegura que desde hace añ;os el transporte público dejó de circular por la comunidad por diferentes razones, una de ellas es el estado de las vías, en algunas de las calles internas de la comunidad el asfaltado está muy deteriorado e incluso hay áreas que ni siquiera tienen, es decir, son de tierra.
Situación que también afecta los productores de piñ;a que habitan por el sector, pues para ir a buscar o llevar sus cosechas los camiones caen en huecos y quedan expuestos a sufrir averías.
En el caso del agua potable, vecinos detallan que desde hace añ;os no gozan de este servicio por tuberías, por lo que tienen que comprar a los camiones cisternas en 1.5 dólares la pipa o conservar la que cae de la lluvia durante todo el añ;o para evitar comprarla tan seguido y así destinar ese dinero a alimentos.
«Hay personas que cuando llueve agarran el agua y la van rindiendo lo más que pueden, mientras que hay otros que le compran a camiones cisternas, esa la venden en $1.5 cada una de las pipas. Desde hace añ;os no tenemos agua por tubería», dijo Torrealba.
El agua que conservan de la lluvia es la que usan para el riego de los cultivos que se dan por esta zona.
En cuanto a las fluctuaciones eléctricas, habitantes destacan que son frecuentes y que pueden durar varias horas, pero no es sólo tener todos los equipos apagados, sino que comunicarse cuando esto ocurre se les hace imposible porque sus teléfonos quedan sin señ;al. Además, que en las noches es una «oscurana» por el poco alumbrado público que les funciona.
También denuncian que la recolección de basura es muy deficiente, porque desde hace añ;os no pasa el camión del aseo, obligándolos a acumular la basura para sacarla a la avenida o quemarla para deshacerse de ella.
Habitantes piden mayor atención de los entes gubernamentales, pues aseguran que es una comunidad productiva que podría crecer más si se brinda una mejor calidad en los servicios públicos, pues al contar con un suelo semiárido se dan frutos, como la piñ;a y la parchita.
