En El Empedrado, municipio Torres, se surten de agua a través de nacientes naturales
Anny Giménez | LA PRENSA DE LARA.- Más de 1.700 personas dependen de seis nacientes de agua para surtirse debido a la falta del servicio por fallas en la tubería. En El Empedrado, población del municipio Torres del estado Lara, los burros, caballos y motos son el medio de transporte que les permite a los lugareños llegar a los manantiales.
Copeisito, Higuerón, Casas Viejas, La Manga, Bolívar y Cruz Verde son las fuentes naturales que surten al pueblo. Para llegar a ellas, quienes tienen la responsabilidad de buscar el agua y llevarla a sus casas, deben atravesar senderos angostos, rústicos y empinados.
Wilfredo Oñate, vive con su mamá y cada dos días recoge 100 litros de agua en tres bidones que monta en su caballo macho, comenta que ya perdió la cuenta del tiempo que tienen sin que el agua les llegue por tubería, hacer el recorrido hasta los pozos es parte de su rutina.
Para muchas personas pareciera que esta modalidad de usar burros para cargar agua, ya había quedado en el pasado, sobre todo al ver por los caminos que atraviesan los cargadores. Los tubos de agua están fuera de servicio desde hace unos 12 años.
Los animales tiene sus amarres y sillas para cargar bidones que pueden contener entre 20 y 60 litros cada uno; de igual forma, las motos tienen una adaptación a los lados del caucho trasero, son bases hecha de cabillas donde montan las pimpinas.
No todas las personas pueden llegar hasta las nacientes por lo que compran una pipa de 200 litros en 5$. Quienes no tienen para cancelar ese monto o viven cerca de las fuentes van a pie con tobos a buscar lo que necesitan. Esa agua la hierven si es para preparar alimentos o tomar y el resto la utilizan para lavar y bañarse y para el sanitario o poceta.
Luego de ese tiempo, las cuadrillas de la hidrológica no volvieron a aparecer, razón por la cual el daño y la falta de servicio se mantiene, destaca Torrealba. Reconoce que tienen una gran bendición de contar con las nacientes y por estar ubicados en las zona más cercana al estado Trujillo, al pie del monte andino, el clima les permite tener agua todo el año; sin embrago, en épocas de sequía que van de mayo a agosto, se hacen colas más largas para surtirse.
El Empedrado es un pueblo que vive de la ganadería y la siembra; es decir, que las jornadas arrancan muy temprano por lo que a primera hora de la mañana en las fuentes las colas son largas, hasta dos horas pueden tardar en lograr llenar sus envases.
Los que venden, en la mañana distribuyen a sus clientes y en las tardes deben regresar para llenar los envases de sus casas. El agua es necesaria para todo y todos los días.
La comunidad sigue esperando que personal de la municipalidad regrese a ver por qué la reparación no sirvió. Están conscientes de que el suministro de la red de agua es competencia de la gobernación de Lara pero en vista del tiempo que tienen sin servicio se alegraron por la disposición de la alcaldía de Torres, esperan que no sea una promesa más, sino que cumplan con la reactivación del servicio.