Víctor A. Rodríguez | LA PRENSA DE LARA.- Una polémica jugada estratégica en el último turno de Miguel Cabrera de parte del manager de los Yankees de Nueva York Aaron Boone, causó revuelo en el Comerica Park y en gran parte del mundo del béisbol, sin embargo el venezolano pidió calma que el inatrapable llegará en cualquier momento y que eso es parte del juego.
Boone le mandó a dar boleto intencional a Cabrera en el octavo inning luego de tener la primera base desocupada, habían hombres en segunda y tercera, sin embargo decidió llenar las bases para buscar el out en cualquier parte en caso de un rodado. Inmediatamente los presente en el estadio de los Tigres de Detroit llenaron de abucheos la decisión y las opiniones no se hicieron esperar en las redes sociales ya que todos esperaban el batazo histórico.
La estrategia no le salió al neoyorquino ya que Austin Meadows bateó hit de dos carreras para ampliar la ventaja 3-0 que a la postre fue la definitiva, los silbidos siguieron en el estadio ya que la fanaticada mostró inconformidad.
Terminado el episodio y cuando Cabrera iba hacia el club house alzó las manos pidiendo calma y paciencia.
«Es parte del juego. Es el hermoso juego de béisbol. Me fui de 3-0, pero ganamos. Estoy feliz. Varios niñ;os me dijeron que no fueron a clases hoy por venir a verme. Les dije que no lo hicieran, que tenían que estudiar», fueron las palabras en el pasillo luego del encuentro del maracayero según Daniel Álvarez Montes de El Extrabase.
Cabrera no se ha mostrado desesperado en el plato como el añ;o pasado cuando buscaba el jonrón 500, sin embargo el día de ayer no tuvo suerte en tres turnos y se ponchó en dos ocasiones.
«No tenía dudas en mi cabeza, sabía que (Aaron) Boone iba a darle la base por bolas intencional. Su compromiso es con su equipo y quería ganar el juego», dijo por su parte el manager de los Tigres A.J. Hinch quien al parecer tenía el panorama más claro.
Hoy inician una serie ante los Rockies de Colorado en el mismo feudo de los felinos, el encuentro de mañ;ana será a las 7:10 de la noche y el sábado será a la 1:10 de la tarde (ambas horas de Venezuela).
Toda Venezuela y parte de la fanaticada en los Estados Unidos está a la espera del inatrapable número 3 mil para Cabrera, un futuro miembro del Salón de la Fama.