Agencias | LA PRENSA DE LARA.- Por tercer año consecutivo, los Caribes de Anzoátegui consiguieron un boleto a la Serie Final de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) en donde buscarán ratificar su título y representar de nueva cuenta a Venezuela en la Serie del Caribe 2022, reseña .
Esta es la cuarta ocasión en un lapso de cinco años que la tribu disputa la final del béisbol venezolano. Además, de 2010 a la fecha, Caribes cuenta con dos subcampeonatos y cuatro títulos en su haber, lo que lo coloca como el mejor equipo de los últimos 10 años.
Todo se escribió en un electrizante encuentro de volteretas que vio desfilar siete cuadrangulares entre los dos equipos para así definir el primer pasaporte a la Serie Final.
Con dos cuadrangulares de Willians Astudillo y uno de Balbino Fuenmayor, Anzoátegui se impuso por 12-8 a Cardenales de Lara, en el parque Alfonso ‘Chico’ Carrasquel de Puerto La Cruz, Venezuela.
Entre Astudillo y Fuenmayor remolcaron cuatro carreras por cabeza, que encaminaron a los aborígenes a la victoria, mejorando su balance a 10-5 y convirtiéndose en el único club con tal cantidad de encuentros ganados en esta etapa del torneo.
La victoria se la llevó el dominicano Rafael Pineda, tercero de seis lanzadores que desfilaron sobre la lomita oriental. El mexicano Esteban Haro concluyó con rescate de 1.1 innings para hacerse de su tercer salvado en la semifinal.
El revés recayó en Máximo Castillo, cuarto brazo entre siete que defendieron la trinchera larense. Enfrentó a tres bateadores, recibió dos jonrones y todos entraron en carrera.
Ahora, Cardenales está obligado a ganar este domingo a Caribes, mientras cruza los dedos para que Navegantes del Magallanes, con récord de 9-6, resbale en Valencia ante los eliminados Leones del Caracas, que marchan con una racha de cinco triunfos.
Si Lara se impone a Anzoátegui y los Navegantes sucumben ante el león, ambos clubes terminarán con 9-7 y definirían el lunes en un juego extra. Si, por el contrario, Magallanes gana y los pájaros rojos hacen lo propio en Puerto La Cruz, el esfuerzo habrá sido vano.