Víctor A. Rodríguez I LA PRENSA DE LARA.- El tachirense Ángel Padrón entró a los libros de la historia del béisbol caribeñ;o, luego de completar el juego sin hits ni carreras ante el equipo de Nicaragua, reveló las claves de dicho encuentro épico.
«En la cuarta entrada lo pensé, vi que tenía juego perfecto, pero mantuve la calma y dije que no iba a pensar mucho en el sin hits para que no me ganaran las emociones. Me enfoqué picheo por picheo, bateador a bateador e inning por inning», reveló.
Apenas fue el segundo juego sin hits en la historia de la Serie del Caribe, que con esta cuenta con 66 ediciones, y la anterior ocasión de un juego de esta magnitud fue en el añ;o 1952, poco más de medio siglo atrás, y precisamente lo recibió una representación venezolana (Cervecería Caracas) ante los lanzamientos del estadounidense Thomas Fine.
«Me quedo con lo que pasó. El tiempo de Dios es perfecto, lo que decida siempre es lo mejor», dijo Ángel Padrón con respecto a esa base por bolas a Raudy Reid que acabó con el juego perfecto en el inicio del octavo episodio. «Lo comenté con un jugador y me dijo: ‘Pero si ese era el hit que te iban a dar se acababa la historia’. Entonces me quedo con lo que pasó».
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