Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- De siete plantas de asfalto que hay en el estado Lara: cuatro en Iribarren, una en Sarare, municipio Simón Planas, otra en Jiménez y una en Torres, tan sólo una se mantiene operativa en la actualidad y es manejada por el sector privado. Opera aproximadamente al 10% de su capacidad instalada, pero es suficiente para atender las escasas obras que realiza la Alcaldía de Iribarren, porque la inversión en materia vial se ha ido a pique desde hace seis añ;os, cuando la Cámara de la Construcción registró el último proyecto de gran envergadura regional. Se trata del Distribuidor Bellas Artes, ubicado en la avenida Ribereñ;a que benefició a los habitantes de Palavecino. Obra que se inauguró el 5 de mayo de 2016 por el exgobernador, Henri Falcón.
Según comunicó el ingeniero, Rubén Suárez, representante de la única planta activa llamada Asfalto Concretos Manto 2016 (ACM), ubicada a 1.5 kilómetros del Monumento Manto de María Divina Pastora, la producción diaria oscila las 50 y 65 toneladas de asfalto. Es una planta diseñ;ada para producir un tope máximo de 500 toneladas de asfalto por día. En el añ;o 2007 lograron mantener los motores de esta empresa activos a esa capacidad, mientras construían la autopista Acarigua Barquisimeto que generó 400 empleos directos y todo un movimiento comercial en Palavecino, Simón Planas y el estado Portuguesa.
Su producción actual es adquirida fundamentalmente por el sector público, la Alcaldía de Iribarren utiliza ese asfalto para el Plan Tapahuecos que se ocupa de atender los baches de las principales arterias viales de la jurisdicción y de algunos barrios y comunidades más vulnerables. Una parte de su producción también es destinada por el sector privado, pero en proyectos puntuales. «Cuando un nuevo emprendimiento requiere culminar un estacionamiento de un local, por ejemplo», expresó.
«Se necesitan unas 100 mil toneladas de asfalto en Lara para atender el problema de vialidad. Eso representaría un presupuesto de 10 millones de dólares anualmente. Así se activarían todas las plantas de asfalto del estado. Si esa inversión se mantiene por cuatro añ;os consecutivos, las personas comenzarán a ver un cambio significativo. Se atenderían arterias viales de mayor prioridad, por donde pasa más tráfico y vivan más habitantes», son las estimaciones de Suárez.
Según comunicó Ronald Arias, presidente de la Cámara de la Construcción del estado Lara, en Venezuela existen 34 mil kilómetros de vialidad. En el añ;o 1998, cuando Hugo Chávez llegó al poder era el país de Latinoamérica que tenía la mayor red de vías pavimentadas, cubría el 85% del país. Hoy el 75% de esas vías están deterioradas y necesitan urgente un plan de rehabilitación y mantenimiento. Esa realidad se extrapola a Lara, donde el sector construcción registra una paralización del 95% desde el 2020, cuando inició la pandemia de COVID-19.
Para que la inversión vial arranque, Rubén Suárez estima que se debe contar con inversión internacion
