María B. Jordán | LA PRENSA DE LARA.- Le quitaron la camisa, le taparon la cabeza y le dispararon en el pecho». Esos son los detalles que cuentan los familiares se Jhonny Pineda (20), quien murió el pasado jueves en horas del mediodía y sus familiares allegados desmienten que haya sido en un enfrentamiento con funcionarios del Cicpc.
«Sabemos que no era un santo, pero tampoco cargaba una pistola ni andaba armado para dispararle a los funcionarios», dijo una allegada de Pineda, quien afirmó que había estado detenido en dos oportunidades; una cuando tenía 15 años y la segunda vez este año, ambas por el delito de robo.
Por el momento, Pineda había salido en libertad con una medida sustitutiva hace tres meses y tenía que irse a presentar y no se la pasaba en la calle ni nada, desconocen si en ese tiempo había tenido algún problema. «Él trabajaba como colector en las rutas que van hacia Cabudare», dijo un familiar.
Sus familiares se encontraban en la morgue el viernes pasado esperando que les entregaran el cuerpo y contaron que Pineda estaba en casa de un tío, ubicada en el sector El Mamón de Pavia, al oeste y llegaron los funcionarios del Cicpc y lo llamaron, ahí fue cuando le quitaron la camisa y le dispararon.
«Hay testigos que dicen que no fue un enfrentamiento, porque era a mediodía, la gente estaba trabajando en sus siembras y vieron todo», dijo un familiar, pero cuando empezaron los disparos les dijeron a los que estaban cerca que se fueran para sus casas.
Pineda deja un hijo de nueve meses y sus familiares rechazan la manera en que murió y además piden justicia por los hechos.