Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- En Táchira, Mérida y Trujillo los agricultores llevan añ;os pagando un impuesto ilícito para trasladar sus alimentos a centros urbanos de otros estados que les afecta su estructura de costo y encarece el precio que pagan consumidores finales. Se trata de «coimas o matracas» que piden algunos funcionarios de seguridad instalados en alcabalas a lo largo de la carretera. Según denunció Fernando Camino, expresidente de Fedeagro, estas se pagan en dólares o «especies»; es decir, ya los productores están mentalizados que deben apartar el 30% de sus cosechas para sortear la avaricia de estos funcionarios y van armando bolsas o guacales de dos kilos o hasta 10, para entregarlas en cada punto de control militar o policial que se encuentran en el viaje.
«No importa que los papeles del camión estén en regla, tampoco que se tenga la Guía de Movilización de alimentos o animales que otorga el Instituto Nacional de Salud Agrícola Integral (Insai). Los policías se agarran de lo más mínimo, piden abiertamente pa’ los frescos; te dicen que les tienes que dar colaboración y si el productor no cede, hasta los provocan para detenerlos», exclamó Camino.
El pasado viernes 15 de julio, Valentina Quintero, periodista impulsora del turismo en Venezuela, encendió las redes sociales con un video publicado en su cuenta de Instagram, donde denunció el excesivo número de alcabalas instaladas a lo largo del país y los abusos cometidos por algunos funcionarios. Un problema que no está afectando solamente a productores del campo, también a viajeros o hasta jóvenes que manejan. Hizo hincapié en lo que ocurre cuando una persona muestra su pasaporte extranjero.
«Si este es un extranjero los funcionarios saben que tienen dólares y de eso se agarran. Y a cualquiera que viaja con maletas le revisan todas las maletas, y lo peor es que te paran en una alcabala y después te paran en la que sigue, y en la que sigue. Cuando tú presentas todos tus papeles que están en regla, te tienen que dejar ir y si te falta un papel como, por ejemplo, el certificado médico vencido no te pueden detener, te tienen que poner una multa y listo», expresó a LA PRENSA. Recomienda a los ciudadanos que viajen con todos los papeles en regla que denuncien a los policías municipales, regionales, nacionales o a la Guardia Nacional que a lo largo de las vías extorsiona a conductores y pasajeros.
«No hay ninguna manera en que se pueda promover el turismo en Venezuela si viajar por carretera es esa ruina. Porque además aquí había toda una inseguridad en las carreteras y era por la delincuencia, porque sí lanzaban botellas, sí lanzaban vidrios, clavos para robar. Pero eso no ha vuelto a ocurrir. Aquí la delincuencia organizada es la autoridad. Entonces allí no tienes cómo defenderte, porque los funcionarios se sienten con todo el de