Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.-& ;Un inocente pagó las consecuencias cuando criminales cobraban una venganza. Un niño de tres años de edad murió tras recibir un disparo en el oído derecho, cuando hampones dispararon en contra de su padrastro en Acarigua, estado Portuguesa.
El sábado a las 8:00 de la noche el pequeño estaba junto a su mamá, padrastro y otros familiares en el barrio La Municipalidad, en Acarigua, cuando dos criminales llegaron hasta donde estaba Luis Chirinos, de 34 años, presuntamente, lo buscaban para matarlo por viejas rencillas y sin mediar palabras dispararon en contra de él.
En medio de la balacera, Luis, quien es el padrastro del niño, fue impactado en el brazo izquierdo, mientras que la mamá del pequeño recibió un disparo en el dedo pulgar izquierdo.
El pequeño estaba jugando en la sala de la vivienda, cuando cayó al suelo luego que una de las balas entrara por la ventana y lo impactara en la región auricular derecha (oído).
Tras lo ocurrido, los criminales huyeron del sitio, mientras que los familiares de inmediato trasladaron a los heridos al Hospital de Acarigua. Los dos adultos tenían heridas leves, pero el infante fue referido al Hospital Pediátrico Agustín Zubillaga de Barquisimeto, pues debía ser intervenido de emergencia.
Ayer en la madrugada al pequeño lo trasladaron, pero no aguantó la operación y pasadas las 5:00 de la mañana murió.
La versión que dieron los familiares de la criatura es que unos criminales llegaron a robarles el equipo de sonido, pero fuentes policiales aseguraron que luego de las investigaciones, el Cicpc descubrió que se trató de un ajuste de cuentas en contra del padrastro del niño.
Ubican a matones
Ayer desde la mañana, los funcionarios de la Coordinación de los delitos contra las personas del Cicpc en Acarigua, comenzaron con las investigaciones para ubicar a los responsables del infanticidio y las lesiones de los adultos y no fue sino hasta el mediodía que lograron dar con los criminales, quienes murieron en un enfrentamiento.
Ubaldo Azuaje (24) y José Antonio Pérez (30), apodado el «Cuchipina» fueron señalados como los presuntos autores materiales del caso.
Los uniformados ubicaron a los tipos en el barrio Andrés Blanco y estos al ver la comisión trataron de huir en una moto.
Los criminales al verse acorralados habrían disparado contra los funcionarios del Cicpc y fue justo en ese momento en el que se originó un intercambio de disparos que acabó cuando ambos cayeron malheridos.