María B. Jordán | LA PRENSA DE LARA.- «Cuando llueve se moja más adentro que afuera». Es la popular frase que se oye en la Catedral de Barquisimeto, ubicada en la avenida Venezuela entre calles 29 y 30, por lo que desde el Colegio de Ingenieros del estado Lara (CIEL) y la Fundación Amigos del Casco Histórico de Barquisimeto, recomiendan que se realice un estudio para conocer a detalle el proceso de reparación que requieren las tres alas del techo de vidrios de seguridad tipo reflectivo.
Julio Gutiérrez, presidente encargado del CIEL, dijo que lo ideal es que se realice un estudio exhaustivo para evaluar cual debe ser el trabajo y los materiales a utilizar, pues en su mayoría son compuestos procesados con elastoméros, que requieren una fijación y una impermeabilización especifica para sellar las goteras que se presentan en el templo. A eso se le suma, una evaluación de las recubiertas de concreto que sostienen el techo para saber si presentan algún desgaste.
Tanto el CIEL como la Fundación Amigos del Casco Histórico de Barquisimeto concuerdan que el último trabajo realizado en la Catedral de Barquisimeto fue en la década de los 90, cuando hicieron unas remodelaciones en el techo, pasando de paneles de acrílico a vidrios de seguridad, pero estos no han recibido mantenimiento y con el pasar de los años se acentúan las filtraciones.
Yuyita de Chiossone, miembro de a Fundación Amigos del Casco Histórico de Barquisimeto, lamentó lo que ocurre en la Catedral cada vez que llueve. «He sido testigo de eso, falta mantenimiento y debería ser responsabilidad del Estado. Antes se destinaba una partida presupuestaria«.
LA PRENSA registra que hace unos años entre colaboraciones y donaciones lograron reparar los baños de la Catedral, cuyo sitio fue clausurado por el problemas de las goteras, y debido a que con frecuencia se anegaba cuando llovía. Hoy la comunidad solicita recuperar el techo de la Catedral.