Maryerlin Villanueva | LA PRENSA DE LARA.- «Vuelta leña» se encuentra parte de la flota vehicular perteneciente a las instituciones públicas que hacen vida en el estado Táchira, debido a la falta de inversión para las mismas, que ha conllevado a que estos vehículos y maquinaria pesada hayan quedado en el olvido.
El politólogo y especialista en gerencia pública, Alirio Moncada afirma que el Estado venezolano no ha ejecutado políticas que conlleven a mejoras de infraestructura ni mucho menos a la recuperación de aquellos carros, camionetas y camiones que sirvieron para el traslado del personal, que daría solución a las problemáticas de las comunidades. Esto trajo como consecuencia que en los estacionamientos de las empresas gubernamentales se aprecie el «cementerio de chatarra» que no ha sido recuperado, y que ha obligado que los trabajadores tengan que ingeniárselas para lograr la movilización en la región.
«El Estado se está quedando sin la capacidad de volverse competente para arreglar los vehículos que están guardados en los estacionamientos, vueltos leña y sin poder usarse» acotó Moncada. A su juicio, el Gobierno a través de los protectorados restó las competencias que tienen las gobernaciones y alcaldías para disponer de una partida de recursos que servía para pagar los costos de mantenimiento y reparaciones de las unidades, que debe hacerse anualmente. «Crearon un instituto paralelo a los tradicionales, el cual hasta ahora, ha desviado los recursos de la hacienda pública, violando entonces ley de Administración Pública y ley de funcionarios públicos» expresó.
Un trabajador de Cantv relató que hace aproximadamente 15 años, contaban con más de 60 vehículos que servían para el traslado del personal hoy día, esta cifra no supera los 20, generando un déficit del 33%. «Cada técnico de reparación tenía una camioneta asignada para realizar sus labores dentro de la entidad, la cual quedaba inoperativa solo cuando esta persona salía de vacaciones, ahora cuatro técnicos se movilizan en un solo carro» dijo.
En Corpoelec, fuentes internas confirmaron que quienes laboran allí se han encargado dedesvalijar los carros y usarlos de forma personal, a tal punto que algunos nunca fueron devueltos. A la fecha solo se encuentran operativas 20 unidades, distribuidas ocho en la ciudad de San Cristóbal y otras 12 en seis centros operativos con los que cuenta la región. En Hidrosuroeste la nueva directiva de este organismo ha dispuesto dinero de la recaudación recibida para mandar arreglar parte de la flota y así las cuadrillas puedan acudir a los diversos sectores y realizar las reparaciones. Edna Ramírez, presidente del Sindicato de Empleados de la Alcaldía de San Cristóbal, detalló que de las 18 unidades con las que contaba el ayuntamiento solo quedan operativas.
El coordinador regional de Transparencia Venezuela, Mauricio Pernía consideró que a nivel nacional existe un cementerio de vehículos yutong que quedaron en el olvido debido que el Gobierno nacional no realizó las reparaciones de los mismos para su funcionamiento.
Universidades en el olvido
El rector de la UNET, Raúl Casanova informó que cuentan con 28 vehículos de los cuales, 4 están inoperativos, 12 requieren cauchos, baterías, entre otros. El resto del parque automotor lo complementan 4 camiones, los cuales 3 no funcionan; de 10 tractores, 7 no sirven; cuatro mini camionetas y 3 dobles cabinas están paralizadas.
Por su parte, el vicerrector académico de la ULA, Omar Pérez Díaz, detalló que esta casa de estudios cuenta con 19 unidades, las cuales están inoperativas. La decana de la UPEL, María Trinidad García comentó que la institución cuenta con 8 unidades, de las cuales solo 3 funcionan, cuyo mantenimiento se ha realizado con ingresos propios, ya que el Ministerio de Educación Superior no envía recursos.
Sin ambulancias
El director de Protección Civil Táchira, Jaiberth Zambrano informó que solo cuentan con ocho unidades para el traslado de pacientes. De esta cifra dos están en el organismo y otras seis fueron dadas en comodato a las alcaldías de Torbes (2), Uribante (2), José María Vargas (1), Michelena (1), Lobatera (1), y García de Hevía (1).
El Cuerpo de Bomberos de San Cristóbal tiene a disposición dos unidades, mientras que Corposalud un total de 21 que deben ser distribuidas para 10 hospitales y 252 ambulatorios.
El Hospital Central y Hospital del Seguro Social Patrocinio Peñuela Ruíz tampoco cuenta con dicho vehículo, por lo que los pacientes deben movilizarse en carros particulares, o pagar un servicio privado cuyo costo oscila entre 100 y 300 dólares.
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