Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- Las empresas de encomiendas en Barquisimeto registran retrasos de entrega de hasta una semana por la severa escasez de gasolina y gasoil que se viene agudizando en Venezuela desde marzo. Un trabajador de una oficina comercial de Domesa, ubicada en la carrera 21 con calle 20, quien pidió no ser identificado, contó que los viajes vía terrestre han caído un 70 % desde entonces. En la región llanera y en la zona sur, los traslados pueden demorar hasta 30 días.
«A los clientes se les notifica que el paquete va a tardar por la dificultad de conseguir gasoil, combustible que utiliza la mayoría de transportes de carga pesada. También por fallas en las flotas de camiones, a veces se accidenta alguno y repararlos toma tiempo, ya no se tiene la misma cantidad de unidades operativas que en el pasado por los costos de mantenimiento», alegó. La empresa sólo transporta encomiendas a nivel nacional, en el caso del municipio Iribarren hay al menos 10 oficinas.
«Los precios se están incrementando una vez al mes de acuerdo a la hiperinflación y al aumento de gastos adicionales que genere conseguir combustible», resaltó. Según la información exhibida en el lugar, los viajes se cobran en bolívares, el más económico es el paquete que pesa 500 gramos y tiene un precio de 13 millones 806 mil 573 bolívares, equivalente a 4,02 centavos de dólar; una caja de 10 kilos tiene un valor de 45 millones 180 mil 360 bolívares, que representan 14 dólares; una encomienda de 30 kilos tiene un valor de 158 millones 736 mil 399 bolívares, o 49,02 centavos de dólar.
Puntualizó que en diciembre de 2020 venían registrando una demanda promedio de 80 envíos diarios, en la actualidad oscila en 30 envíos diarios. «Hay zonas del país en que ya no se está prestando servicio, como San Fernando de Apure, allá se cerró la oficina por poca demanda. Los envíos al estado Bolívar también demoran, ya que sólo están funcionando dos oficinas, Puerto Ordaz y Ciudad Bolívar», comunicó.
En el caso de la empresa MRW, una trabajadora de la franquicia ubicada en el centro de la ciudad, indicó que desde que inició la pandemia y producto de la escasez de combustible, los paquetes se entregan directamente en las oficinas, dejaron de realizarse traslados a las casas de los clientes.
«Ya no hay entregas inmediatas, que eran cuando el cliente traía un paquete y pedía que llegara el mismo día, ahora a ciudades cercanas las encomiendas se entregan al siguiente día, en ciudades distantes la entrega demora cuatro días», puntualizó, quien también pidió no ser identificada. En la página web de la franquicia MRW indican que hacen traslados a partir de 501 gramos, recorriendo hasta 80 kilómetros a cualquier rincón de Venezuela.
En el caso de esta empresa los precios se modifican cada 30 o 60 días, un cartel que tienen en la taquilla de recepción indica los precios en bolívares que se mantienen desde el 3 de mayo. Un paquete de 150 gramos tiene un valor de siete millones 140 mil bolívares, equivalentes a 2.02 centavos de dólar; una carga que pese de 8 a 10 kilos tiene un costo de 84 millones 490 mil bolívares, que representa 26 dólares, y una encomienda que esté entre los 24 y 27 kilos un valor de 159 millones 600 mil bolívares, al cambio son 49 dólares con cinco centavos.
«Yo he percibido un incremento en los precios de los envíos desde que inició el año de al menos 30 %, pero aún las tarifas resultan accesibles», contó a LA PRENSA Omar Berrías, comerciante, quien mensualmente recibe una encomienda de Valencia, en el estado Carabobo y San Cristóbal, en Táchira.