Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- El anuncio que hizo Juan Guaidó el sábado 12 de febrero en la marcha del Día de la Juventud en Caracas, del nuevo proceso que inicia la oposición para fortalecer la unidad y renovar a sus liderazgos en la búsqueda de un candidato presidencial para el 2024, es una tarea ardua de cumplir, según analistas políticos. Sobre todo, cuando los partidos dejaron de hacer elecciones internas desde 2004 y los dirigentes más representativos de la escena política, como Guaidó, Henrique Capriles o Leopoldo López, que está en el exilio, tienen un nivel de aceptación que no supera el 14%, según reveló en enero la encuestadora Delphos.
Daniel Varnagy, doctor en Ciencias Políticas y profesor titular de la Universidad Simón Bolívar (USB), indicó que el último proceso en donde los partidos tradicionales participaron en unas primarias, transparentes, democráticas y abiertas fue hace una década en 2012, cuando Henrique Capriles, fundador de Primero Justicia, resultó vencedor para medirse contra Hugo Chávez en sus terceras presidenciales, y posteriormente tras su muerte contra Nicolás Maduro en 2013.
«Ese hito fue totalmente transparente. Todos los partidos políticos decidían de una manera bastante abierta cómo iban a ser los representantes que eran los precandidatos y luego se hicieron unas primarias para elegir los candidatos. Fue exitoso porque generó confianza en la sociedad. Ahora me decepciona que hay una generación joven que no se le está permitiendo surgir dentro de las antiguas instituciones políticas venezolanas», expresó.
Considera que las cabezas principales de los partidos de la plataforma unitaria están reacias a renovarse, aunque hablen de refrescamientos internos. «La gran mayoría son dirigentes antiguos y no me refiero a la cantidad de añ;os que tengan en las instituciones, sino a la mentalidad porque muchos directivos de esos ámbitos son personas cronológicamente jóvenes, pero que tienen mentalidades políticas atávicas, entonces mi preocupación con la renovación no es cronológica, es filosófica», resaltó.
Colocó como ejemplo el caso de Juan Guaidó, tiene 39 añ;os y tres añ;os como presidente interino de Venezuela, pero la mayoría de los sondeos de opinión le dan un gran índice de desesperanza. «Es la persona que pasó en menor tiempo de la mayor esperanza a la mayor desesperanza. Pero junto a él están muchos otros dirigentes que ya pertenecen a otro ciclo histórico, entonces yo pienso que es conveniente tratar de ver hacia las bases de los partidos políticos, sobre todo las bases que no están permitiendo ser escuchadas por los niveles más altos de las organizaciones», apuntó.
Para Eglée González Lobato, experta electoral y exconsultora política del Consejo Nacional Electoral (CNE), el liderazgo nacional de los partidos debe legitimarse ante su propia militancia y ante la sociedad que ha demostrado sentirse apática a los procesos electorales, como ocurrió en los comicios regionales y municipales del 21 de noviembre de 2021, cuando la abstención superó