María B. Jordán | LA PRENSA DE LARA.- Con pancartas y un mensaje contundente de mejoras condiciones laborales y salariales, las enfermeras protestaron en su día. No reciben dotación de uniformes ni insumos de bioseguridad a pesar que se los han prometido, adicional que están expuestos a una explotación laboral devengando solamente 3.5 dólares al mes.
«No estamos celebrando, estamos protestando» decían las enfermeras en toda la entrada del hospital pediátrico Agustín Zubillaga, mientras que al mismo tiempo denunciaban la precaria situación laboral en la que se encuentran al ganar un pírrico salario que obliga a un déficit de personal de un 80%.
El sector de enfermería contó que no les dotan ni siquiera de uniformes ni materiales de bioseguridad y con los 3.5 dólares que ganan al mes no les da para cubrir esos gastos. Añaden que ni siquiera una bolsa de comida tienen como beneficios. «En otros centros de salud de otros Estados dan bolsa de comida y hasta bonos de 20 dólares y a nosotras no» dijo Marielvis Rodríguez, enfermera.
En el Pediátrico cuentan que también les prometieron un médico laboral pero hasta el momento no ha llegado, por lo que esperan que el ministerio cumpla lo más pronto posible.
El personal de enfermería jubilado también alzó su voz el día de ayer. Cuentan que luego de años de servicio, trabajo y entrega a la salud, ellos hoy no puedan ni siquiera comprarse una pastilla para la tensión porque no les alcanza y mucho menos les hacen una dotación.
Yaneth Vergara, quien trabajó durante 38 años dice que ellos están pisoteados con sus beneficiosos y que incluso en medio de la pandemia no han sido llamados para ser vacunados contra el covid, luego de haber trabajando por tanto tiempo «y con lo que cobramos no nos alcanza ni para una pastilla, no podemos seguir así».