Jesús Pérez | LA PRENSA DE LARA.- El presidente venezolano, Nicolás Maduro, planteó este domingo la posibilidad de aplicar a nivel nacional, después de la Semana Santa, el esquema «7 + 14», es decir, siete días de flexibilización y dos semanas seguidas de cuarentena radical con el objetivo de frenar la curva de contagios de la COVID-19 en el país.
«Luego de Semana Santa, se vienen los siete días de flexibilización. Evaluando la situación es necesario continuar con el método para que se mueva la economía, luego podríamos volver a otros 14 días de cuarentena radical, piénsenlo», señaló el mandatario durante la emisión del balance nacional sobre la propagación del coronavirus.
La propuesta será puesta a la orden de la Comisión Presidencial para la Prevención y Control de la COVID-19 para ser evaluada.
El jefe de Estado también informó que Venezuela ha registrado 992 casos adicionales de la COVID-19 durante las últimas 24 horas, con lo que el total de contagios se eleva a 156 mil 655.
Sobre los nuevos casos Maduro no especificó ubicación ni relación del contagio; comunitarios o importados.
No obstante, agregó que la curva de contagios de la enfermedad se ha «desacelerado», sin embargo, admite que aún la situación no está controlada. «La próxima etapa va a ser dura, pero si cumplimos con las medidas de seguridad vamos a salir victoriosos».
Petróleos por vacunas
Sobre la reciente reunión que sostuvo la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, con autoridades de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Maduro afirmó que Venezuela «tiene los recursos para pagar el acceso al mecanismo Covax».
«El primer recurso es la liberación del dinero retenido y el segundo es dedicar petróleo por vacunas, lo decidí hoy, Venezuela tiene una parte de su producción para comprar las vacunas, tenemos dignidad y recursos», dijo.
Con este plan, «petróleo por vacunas», el Ejecutivo Nacional aspira garantizar las vacunas contra la COVID-19 al 100 % de la población.