La Plaza de San Pedro en el Vaticano fue el escenario de un histórico macroconcierto que reunió a miles de personas de diversas culturas bajo el lema de la fraternidad humana.
El evento tuvo lugar la noche de este sábado 13 de septiembre y busco trascender los límites de presentaciones tradicionales para convertirse en una manifestación cultural y espiritual, con un repertorio que fusionó distintos géneros musicales.
El concierto marcó el cierre de la tercera edición del Encuentro Mundial sobre la Fraternidad Humana y contó con la participación de figuras emblemáticas como Karol G y Andrea Bocelli. Ambos artistas compartieron escenario en una actuación conjunta que se convirtió en uno de los momentos más memorables de la noche, incluyendo la interpretación solista del tenor italiano al clásico “Ave María”.


Un concierto con mucho propósito
Además de su actuación, Bocelli tuvo un papel central como codirector artístico del evento. Según la revista Rolling Stone, fue el encargado de seleccionar el repertorio y liderar los ensayos con artistas de cuatro continentes.
El cantante compartió con el público un mensaje sobre la situación global, invitando a que la «luz de la humanidad brille con música» desde el corazón del cristianismo para enviar un mensaje de paz y hermandad al mundo.
El espectáculo fue complementado con un show de drones y luces que iluminaron el cielo con imágenes representativas del cristianismo, como fragmentos de la Capilla Sixtina y una imagen del rostro sonriente del fallecido Papa Francisco.