La falta de prevención con hábitos saludables que empiecen por la adecuada alimentación, actividad física y control médico rutinario son unas de las principales causas para que las enfermedades coronarias cambien de patrón. Según la Sociedad Venezolana de Cardiología (SVC) y demás especialistas, durante los últimos cinco años no sólo atacan a adultos mayores, sino que ahora son más vulnerables mujeres, menores de 55 años y adolescentes. El infarto de miocardio es la principal afección, seguido de la hipertensión arterial que avanza silente entre jóvenes.
Tanto la SVC y el Programa Regional Cardiovascular confirman que en el país se mantiene ese promedio mundial de seis hipertensos por cada 10 pacientes en consulta. Es la segunda causa grave y por complicaciones puede desencadenar en infarto, sin distinción de edad pero que se acentúa en menores de 55 años. «Las enfermedades cardiovasculares siguen enfilando la fatalidad y de las cardiopatías isquémicas por obstrucción en arterias coronarias, el infarto del miocardio encabeza la lista», señala la doctora Susana Blanco, presidenta de la SVC, ante el impedimento del flujo sanguíneo al músculo del corazón. El dolor puede ser tan intenso que se extiende por todo el brazo izquierdo, espalda y cuello. Es una sensación tan desesperante que corta la respiración y la persona desvanece.
Blanco lamenta que la muerte de las mujeres dejó de encasillarse en el cáncer de mama o cuello uterino, porque la cardiopatía gana terreno. El factor social ha sido determinante con una mayoría que asume las cargas del hogar, sus hijos y hasta de sus padres mayores. La prioridad es resolver para sus seres queridos y les frena la condición socioeconómica, cuando se necesita cubrir el sustento diario, educación y demás gastos que obvian esa posibilidad de la evaluación anual médica, incluyendo la valoración cardiológica, sin estar forzadas por la aparición de síntomas.
«Tantas cargas de responsabilidades para la mujer le resta importancia a sí mismas y desestiman cualquier tipo de alarma, ese clamor del cuerpo», indica y precisa que se trataba de enfermedades más recurrentes en hombres, pero el desgaste femenino pasa factura en el deterioro progresivo de la salud.
Prevención para las persona menores de 60 años
Cuando hablan de la necesidad de retomar los hábitos saludables, la doctora Siriley Maraver, coordinadora del programa regional cardiovascular, advierte el daño del sobrepeso y obesidad que junto a la indebida alimentación condenan a los adolescentes y jóvenes. Los hace presa fácil de la hipertensión arterial, junto al sedentarismo arrastrado por el abuso en el uso de las pantallas y sin practicar actividad física.
Se refieren a una alimentación que debe dejar de etiquetarse como inalcanzable, al exigir el consumo de más vegetales y verduras, así como evitar el exceso de sal (porque a una comida le agregan sazonadores, salsas industriales y para rematar más sal, ignorando lo permitido de sólo cinco gramos al día), muchas veces de manera inconsciente.
El alcohol y tabaquismo son otros grandes enemigos que pueden inducir a los accidentes cerebrovasculares, reemplazo valvular o finalmente al infarto de miocardio.
De allí, lo indispensable de acentuar la motivación de los hábitos saludables, reinventando con recetas de calabacín, tubérculos, auyama y otras opciones económicas que alejan del daño de las grasas. Eliminar vicios, empezar a ejercitarse y en caso de tener el diagnóstico de hipertenso, cumplir con el tratamiento, adecuada medida de tensión arterial y ser responsable con el control rutinario ante el riesgo de ignorar el ajuste de las dosis.
Maraver invita a insistir en la difusión de concentrarse en la calidad de vida, a través de los medios tradicionales de comunicación, redes sociales y con programas permanentes, tal como «Un día con tu corazón», liderado por Ascardio desde 1989 junto al programa cardiovascular para acercarse a los niños. Atienden a estudiantes desde preescolar hasta sexto grado con 10 divertidas estaciones y enfocando la prevención para cuidar el corazón.
Esa preocupación por la vida saludable, también es resaltada desde la unidad cardiovascular de la Cruz Roja en Barquisimeto, donde su gerente, Gabriela Machín, precisa que desde el 16 hasta el 30 de septiembre vienen realizando una jornada con importantes ponencias y se refuerza con el recordatorio en las actividades en comunidades.
Según la directora de Salud, doctora Aura Costero, no se pueden olvidar las secuelas coronarias poscovid-19 y la población debe entender la importancia de cuidarse. Una conciencia a partir de la alimentación y el chequeo cardiológico rutinario.
Los especialistas recalcan que «¡a más latidos del corazón, más vida!», y es posible evitar cualquier enfermedad cardiovascular.