MARÍA DE SOUSA | LA PRENSA .- La última parada del Madrugonazo de Henri Falcón ayer en Pueblo Nuevo, se convirtió en un desastre, donde se enfrentaron miembros de los consejos comunales de la zona, el gobernador tuvo que salir corriendo y la Guardia Nacional poner orden.
La abandonada cancha de Pueblo Nuevo, en la carrera 14, fue el motivo de la discordia. Afectos al partido rojo, amanecieron en la cancha con el objetivo de impedir que Falcón “les pasara por encima a sus decisiones”, pues según ellos, desde hace 7 meses, ya tenían planificado la reparación de su cancha, donde hasta piensan armar una lavandería comunal.
Y es que ayer, precisamente Henri Falcón, arrancaría la recuperación de este espacio, donde le colocaría hasta grama artificial, pero parte del consejo comunal de la zona, dijo sentirse excluido de esta decisión y por eso fueron a reprocharselo y decirle que en su sector, mandaban eran ellos.
No dejaron entrar las máquinas, ni mucho menos a los obreros, le gritaban: fuera, fuera… y más atrás le replicaban los seguidores del gobernador, quienes le decían que eran puros intrusos, que pensaran en el beneficio de la comunidad y que su única intención era sabotear el arranque de campaña del “gobernador del progreso”.
Lo cierto, fue que se armó un alboroto, se insultaron, empujaron y hasta golpe se repartieron en medio de la confusión y ese gentío alterado, que justificaba su pelea en querer el beneficio del pueblo, pero en realidad lo que soltaban por sus bocas eran puros insultos políticos. Al final, luego que se fue Henri Falcón, y resultaron más de uno golpeados, reinó la cordura, y los dos bandos, acordaron que se reunirían el próximo domingo, para ver cual proyecto va. Los 17 consejos comunales tendrán sus derecho a palabra.