William Croes | La Prensa.- Comerciantes informales de la ciudad meten gato por liebre con productos de primera necesidad. Alimentos y artículos de higiene que están escasos los están adulterando y vendiendo a precios exorbitantes. Cada vez más personas se llevan el chasco porque pagan un dineral por algo que no les sirve y hasta puede resultar peligroso.
El café artesanal es uno de los que más está saliendo puyao. Dentro de los empaques plásticos mezclan los granos molidos con la borra (restos de café) y lo rinden además con quinchoncho molido. La apariencia es la misma, y los compradores se llevan el estrellón es luego de prepararlo porque es bien amargo y falto de sabor.
“Me ha pasado con el café. Me vendieron medio kilito en mil bolívares y tuve que tirarlo todo a la basura”, expresa Robelia Heredia, quien se vio forzada a comprar este producto “artesanal” en un tarantín de la carrera 15 porque no puede comenzar el día sin una buena taza de café.
Con otro de los alimentos que se ha visto irregularidades es con la venta de azúcar morena. Esta es una de las alternativas a la refinada, pero personas que la compran en comercios informales en Carora, municipio Torres, señalan que la mezclan con arena de playa. En el empaque se disimula por el color y la consistencia, pero basta abrir el paquete sellado para saber que se perdieron los reales de la compra.
En tiempos de escasez ha ganado auge los productos artesanales y hechos en casa. Pero lo que no contaban los consumidores es que con ello viene la trampa de comerciantes que para rendir los artículos se valen de artimañas que friegan a las personas. “A quién le reclama uno si se los compra a buhoneros, que son itinerantes y por lo general no tienen un puesto fijo”, indica Jorge Segovia, una persona que ha tropezado con la piedra de los rubros puyados.
El jabón azul es otro de los productos que se suele alterar con facilidad. De una bolsa de cinco kilos sacan hasta 10, la manera de ganarle es rindiendolo con cal y polietileno, este jabón rendido no saca espuma y hasta daña la ropa.