Osman Rojas | LA PRENSA.- En centros de consultas rutinarias se han convertidos los CDI y Barrio Adentro del estado Lara. La escasez de medicamentos que hay a nivel nacional le pasa factura a los consultorios populares quienes se han visto en la obligación de referir pacientes por no tener cómo brindarles la atención médica.
Andrea Giménez, trabajadora del CDI de Tamaca, relata que el pasado día sábado, al centro médico llegó un niño con mucha dificultad para respirar. El niño, que según cuenta la fuente tenía unos 10 años, presentaba un severo cuadro de asma, pero en la institución no tenían ni siquiera para nebulizarlo y por eso los padres agarraron un rapidito en la esquina y se llevaron al infante a Barquisimeto.
“Esto también se vino abajo. Aquí lo único que llega es pastillas para la tensión y solución fisiológica. Los CDI se han ido quedando en el aparato y ya ni antibióticos tienen”, lamenta la trabajadora.
Y es que, desde mediados de octubre del año pasado, los hospitales del sistema paralelo de salud han sufrido una desmejora notable en sus servicios e incluso, en el CDI de Duaca se dejaron de hacer placas los tres primeros meses del año por problemas con los equipos y ausencia de reactivos.
Juan Carlos Camacho, médico internista integrante del grupo Lara Entera por la Salud (LES), criticó duramente la operatividad de los CDI en la actualidad y aseguró que el Gobierno nacional “fracasó”, en su intento de sustituir el sistema de ambulatorios.
“Se tiene la infraestructura, pero no se capacitó a nadie y ahora estamos viendo los riesgos de improvisar. Ahora mismo el sistema paralelo de salud es una burla y los más afectados son los grandes hospitales que están colapsados por la cantidad de pacientes que se quedan sin ser atendidos”, aseveró el especialista.
La Prensa intentó hablar con voceros de los CDI en Lara, pero ninguno quiso declarar.