José Miguel Najul | LA PRENSA.– La oposición prefiere ignorar las amenazas del ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol, quien indicó que la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ha iniciado un plan de desestabilización justo antes de que se concrete la toma de la Oficina Regional Electoral (ORE) del CNE, prevista para el día de hoy.
El alcalde Alfredo Ramos hace caso omiso a la postura del ministro, e insiste en que la convocatoria realizada por la oposición parte de “un marco constitucional, democrático y transparente”.
“Es más, invitamos a todos los ciudadanos que quieran unirse a nosotros el día de hoy en la sede del CNE a que lo hagan, para presionar por el referéndum revocatorio”, dijo.
Víctor Castillo, dirigente de la MUD, opina que “Reverol no está hablando como ministro, sino como un militante psuvista a las órdenes de Nicolás Maduro, que es el presidente de su partido”.
Castillo recuerda que la población tiene libre acceso a las calles, “y más si es para hacer una manifestación pacífica y constitucional”.
En esto coincide el alcalde de Palavecino, José Barreras, quien ha calificado los últimos movimientos y posturas de las autoridades oficialistas como “patadas de ahogado”.
“Hoy el Gobierno está en su peor momento, está acorralado y es precisamente por eso que es más peligroso”, aseguró el mandatario local.
Sobella Mejías, dirigente de Acción Democrática (AD) y exrectora del CNE a nivel nacional, sostiene que este tipo de acciones generan una presión necesaria que recuerda a las autoridades el clamor popular de la sociedad venezolana.
Según Mejías, técnicamente es viable la ejecución del referéndum revocatorio este 2016 (lo que implicaría la salida del chavismo del poder, si la oposición logra ganarlo).
El día de hoy, la Mesa de la Unidad regional ha convocado al cumplimiento de la agenda nacional de la coalición opositora, que consiste en la toma de la ORE, con una concentración de seis horas en la avenida Morán.