Euseglimar González | LA PRENSA.- “Mi hermano se complicó porque las enfermeras no le pusieron el tratamiento por un día”, dijo Nancy Villegas, hermana de Nenmy Manuel Villegas Bocourt, de 56 años, quien murió ayer en la mañana producto de una herida por arma de fuego en la pierna y quemaduras en el 50 por ciento de su cuerpo.
Nancy contó que a su hermano lo hirieron el 15 de noviembre en una finca de Tucacas. Ocho delincuentes se metieron a la granja para robar, Nenmy cuando los vio salió corriendo y se encerró en uno de los cuartos para evitar que le fueran a hacer daño.
Según Nancy, su hermano le contó que los malandros comenzaron a rociar gasolina en los alrededores del cuarto pidiéndole que saliera.
“Como él no salió, los choros comenzaron a disparar en el cuarto y una de las balas lo hirió y luego prendieron candela al lugar, se quemó el 50 por ciento de su cuerpo”, dijo Villegas.
Al parecer, la víctima pidió ayuda y fueron los mismos choros quienes lo auxiliaron, le ayudaron a buscar las llaves del cuarto y le abrieron la puerta, pero huyeron.
No fue sino al día siguiente que un trabajador de la finca lo encontró y lo trasladó hasta el hospital de Tucacas, pero fue referido al centro principal de salud de San Felipe.
Médicos de la capital yaracuyana recalcaron a la familia que debía ser trasladado a un hospital que tuviera área de caumatología por la condición en la que estaba el paciente. Fue cuando la familia Villegas, residenciados en Valencia, decidieron traerlo al Hospital Central Antonio María Pineda.
“Mi hermano nunca estuvo en el área de caumatología, fue muy mal atendido”, comentó Nancy, quien estaba afuera de la morgue sentada en la acera y lucía cansada, pues contó que estuvo ocho días cuidando de su hermano en la Emergencia.