Belimar López | LA PRENSA.- Aumento justo y real. Es lo que pedía el gremio de bomberos del municipio Iribarren al alcalde de la localidad, Aldredo Ramos, durante una protesta este martes 21 de febrero.
Según informó el capitán, Jesús Peña, no han sido beneficiados de los últimos aumentos salariales decretados por el Ejecutivo Nacional, por lo que aún se mantienen con un sueldo de 13.250 bolívares que no les alcanza para cubrir sus necesidades. Son muchas las familias de estos funcionarios que no pueden responder a los gastos de sus hogares para llevar la papa día a día.
Peña denunció que en varias ocasiones han sido amenazados para que se queden callados pero que ya están cansados de que se violen sus derechos como trabajadores. Otro de los problemas que padece el cuerpo de bombero es el del bono de riesgo que a su juicio tiene un monto «muy bajo», de 1.200 bolívares, y en reiteradas oportunidades han solicitado el aumento a la alcaldía, pero solo han recibido como respuesta «no hay recursos».
A media máquina
Detalló que el parque automotor de los Bomberos de Iribarren tiene un déficit de un 98%, que no ha sido abastecido desde el año 2006, durante la gestión de Henri Falcón como alcalde. Las ambulancias también son otro factor que imposibilita el trabajo, por no tener unidades en óptimas condiciones deben hacer traslados de pacientes en carros particulares.
En años anteriores los bomberos realizaban al menos 120 traslados en ambulancias diarios, pero por las fallas de suministros en el parque automotor solo se logran 30, lo que afecta a los pacientes de Iribarren como de otros municipios a los que prestan apoyo.
Con información de Anderson Piña