Euseglimar González | LA PRENSA.- Tirado entre el monte, con un disparo en la cabeza y las manos y pies maniatados, fue hallado el cuerpo de un hombre sin identificar ayer en la mañana en el sector El Mayal en la avenida Ribereña con calle 32.
El cuerpo fue encontrado por vecinos del sector, cerca de una casa que está abandonada desde hace seis meses y confirman que el hombre no es de la zona. Por las fuertes lluvias del jueves el cadáver estaba lleno de barro.
El hombre era de piel morena, cabello rizado de color negro, con barba, de 1,75 de estatura, vestía jean claro y una franela de rayas, de unos 40 años. Tenía una herida profunda en el brazo derecho aparentemente por un machetazo, mientras que el brazo izquierdo fue devorado por los animales. “Ese señor tuvo que ser torturado. Hasta en los hombros tiene morados”, comentó una mujer en el sitio del suceso.
Relatan que no escucharon ruidos ni disparos el jueves. Aunque fuentes comentaron que el cuerpo tenía alrededor de un día y medio en la zona, pues ya estaba comenzado el proceso de descomposición. Los animales ya habían devorado parte de su cuerpo.Entre las pertenencias que cargaba el hombre estaban una cédula, un carnet y una fotocopia de cédula, pero según información policial ningunas pertenecían al hombre.
Funcionarios adscritos a la División de Homicidios del Cicpc llegaron hasta el sitio para hacer el levantamiento del cadáver y colectar evidencias. El móvil del asesinato se investiga.
El cuerpo sin vida fue trasladado hasta la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda. Ayer en la tarde el hombre no había sido reconocido por familiares.