Euseglimar González | LAPRENSA.- Un comerciante árabe fue asesinado ayer al mediodía cuando dos hampones llegaron hasta su local “El Rey del Pollo” y lo asesinaron de un disparo en la región intercostal derecha. Uno de los homicidas está detenido.
Antonio “Tony” Sayegh Debbssiee, de 55 años, estaba sentado en su local en la calle 40 con carrera 22, cuando dos hampones le llegaron sorpresivamente y le pidieron el celular. Cuentan que Antonio estaba hablando por teléfono, el hombre metió su mano en el bolsillo y en ese momento uno de los criminales le disparó.
“El choro pensó que el se iba a sacar del bolsillo una pistola, pero no fue así. Antonio tenía dos celulares. El choro le disparó y se fue corriendo”, contó uno de sus trabajadores.
En el piso y cerca de la nevera de refrigeración del local quedaron rastros de sangre de “Tony”. El hombre fue auxiliado por sus familiares que lo llevaron hasta el Oncológico, en la calle 41 entre carreras 20 y 21. Luego de unos minutos el hombre murió por el disparo.
Relatan que uno de los hampones salió corriendo, pero el otro fue alcanzado por la multitud de personas que enardecidos por lo que había sucedido comenzaron a golpearlo y querían lincharlo. Se pudo conocer que por la zona iba pasando un “petejota” y fue quien hizo la detención, aunque intentó alcanzar al otro criminal no pudo.
Cuentan los vecinos del sector que escucharon 4 disparos, pero sólo una bala alcanzó a “Tony”. Aparentemente al hombre le dispararon con un revólver.
El delincuente quedó identificado como Ramón Enrique Guanay Rodríguez, quien supuestamente sería el que accionó el arma y asesinó a Antonio, aunque será tras las investigaciones de los funcionarios del Eje Contra Homicidios del Cicpc que investiguen su culpabilidad.
Llanto y dolor se vivió durante media hora cuando el personal médico le informó a los familiares de “Tony” que había muerto. Los parientes se abrazaban entre ellos y lloraban por la pérdida de una “gran persona”, como lo describieron sus empleados y vecinos de otros comercios.
Relatan que “Tony” acostumbraba a sentarse afuera del local. “Era costumbre de él sentarse en esa silla”, sostuvo un familiar de la víctima. El cuerpo fue trasladado hasta la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda.
Una “joyita”
En 2014 Enrique Guanay resultó herido por su compinche cuando cometían un atraco en la carrera 13 con calle 50. Ese día el compinche que andaba de “parrillero” se bajó de la moto y se metió a una cauchera y con una pistola despojó de sus pertenencias a un funcionario.
La víctima usando su arma de reglamento persiguió al delincuente y le disparó, en ese momento el compinche le disparó al funcionario y se originó un intercambio de disparos. Lo que no imaginó es que le dispararía a Enrique.
Enrique, quien conducía la moto, cayó al asfalto malherido con dos disparos uno en el tórax y el otro en el fémur derecho. El “amigo” se fue corriendo del sitio.