Ana León | La Prensa.- Francisco Sánchez trabajó durante siete años en Urbaser y a pesar de su dedicación la empresa le está pagando “una miseria por sus años de servicio”, tras el cierre de la misma.
La empresa le debe a Francisco la liquidación por los siete años de servicio, dos bonos vacacionales, dos utilidades y 22 meses de fideicomiso.
“A pesar de toda esa deuda lo único que me quieren dar son 170 mil bolívares. Con eso no se hace nada hoy en día”, expresó Francisco a las afueras de la empresa.
Hace casi un año Urbaser cerró las puertas de la empresa y no dejó entrar a ninguno de los 172 trabajadores que ahí laboraban. Debido a ello decidieron abrir una mesa de negociación para “arreglar” a los trabajadores que allí laboraban.
Alrededor de 98 obreros ya recibieron su liquidación, mientras que estos 72 restantes luchan a diario para que le paguen lo justo.
Se intentó hablar con el abogado del dueño de la empresa que se encontraba en el sitio para escuchar la versión de ellos, pero manifestó que no iba a declarar.