Ana León | La Prensa.- Los recolectores de orina y heces eran casi gratis hace unos años atrás, pero el alto costo de las cosas y la crisis de salud han hecho que sus precios se eleven de tal manera que sean hasta difíciles de conseguir.
Hace solamente tres años atrás, un recolector de heces y orina podía costar entre 100 y 200 bolívares. Ahora se consigue en las farmacias hasta en 33 mil 320 bolívares.
Los recolectores de orina son los que más han elevado sus costos. En un recorrido que hizo La Prensa, se constató que los recolectores de orina, dependiendo de la farmacia, varían entre los nueve mil y 30 mil bolívares.
Mientras que los recolectores de heces están entre los cinco mil bolívares y los 21 mil novecientos bolívares, aproximadamente.
Para el ciudadano de a pie estos costos son demasiado elevados. Yusbelis Bastidas, una auxiliar de enfermería, destacó que esto ocurre debido a que a los recolectores se les aplica el IVA a los precios.
“Los vendedores se aprovechan de que tienen que cobrar el IVA y le elevan los costos de manera exagerada. Para mañana, el precio será peor”, comentaba Bastidas.
Lo cierto es que esto le está costando un gran sacrificio a la población, pues muchos deben sacar de donde no tienen para poder costear los recolectores que necesitan para hacerse los exámenes de orina y heces.
“A menos que tenga que ir al médico con los exámenes haré el sacrificio para comprar los recolectores, pero de resto no pienso adquirirlos con esos precios”, decía José Valera, un señor pensionado que trabajó muchos años como camionero y ahora subsiste con lo poco que tiene.
Hay personas que les ha tocado hacer ese “sacrificio” y se han llevado más de una sorpresa. Tal es el caso de Eusebio Montero, un señor pensionado que necesitaba hacerse unos exámenes, pero al ver que los recolectores pasaban la cantidad de 30 mil bolívares salió decepcionado y abatido de la farmacia a donde fue a comprarlos.
Lo que antes era necesario ahora se evalúa y se determina si es verdaderamente “urgente”, y por eso los guaros van pensando si adquirir los recolectores sea algo importante.
Por más que quieren mejorar su calidad de vida, la situación país los golpea y no los deja ni siquiera intentarlo.