Osman Rojas | LA PRENSA.-Si no te pela el chingo te agarra el sin nariz. Ese es el panorama con el que se encuentran los enfermos en la actualidad y es que una persona que necesite realizarse exámenes de sangre debe ligar dos cosas: encontrar el reactivo y que no sean chinos o de baja calidad.
Desde el pasado mes de noviembre los enfermos en el estado se han quejado por la imprecisión de algunos diagnósticos en cuanto a las pruebas de sangre y eso tiene una razón, y es que la utilización de reactivos chinos no tiene el mismo efecto en las máquinas de laboratorio, situación que “maquilla” los resultados en algunas pruebas.
Hernán González, trabajador de un laboratorio cercano al Hospital Central, explica que la migración de casas comerciales como Elitech o Alere obliga a los laboratorios a buscar reactivos en otras latitudes. “Las personas deben buscar a los laboratorios que pueden importar porque esos son los que tienen los reactivos correctos. Hay diagnósticos que no se hacen a tiempo por culpa de un mal examen y la gente merece saber eso”, comenta González.
El especialista cuenta que la escasez de reactivos en las calles hace que las pruebas sean entregadas en 48 horas y no en tres, como se hacía hasta hace poco menos de seis meses.
Hay laboratorios que sólo agarran la muestra y lo refieren a otro sitio para el estudio. Por lo general, los tirajes de laboratorios están hechos para realizar 10 exámenes y hay laboratorios que prefieren reunir todas esas muestras antes de gastar reactivos en dos o tres”, comenta.
Ahora mismo, los centros de diagnósticos especializados en Lara registran problemas para la realización de exámenes, como el VIH, pruebas hormonales, electrolitos o gases arteriales.
Las últimas dos pruebas son obligatorias para pacientes en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y cuestan entre 250 y 420 mil bolívares, respectivamente.