Evana Materán | La Prensa.- Las jugueterías reciben la visitas de padres buscando juguetes desde el mes de octubre. Los clientes primero recorren los pasillos pero cuando ven los precios se van desanimados.
En las tiendas de la avenida 20 la gente se acerca a mirar las vitrinas y entran para ver si encuentran alguna oferta. Se emocionan al ver la cantidad de juguetes que hay en los estantes.
Agarran los que les piden sus hijos y se acercan a los vendedores para preguntar los precios de aquellos juguetes que no tienen etiqueta.
Se sorprenden cuando escuchan las cantidades que sobrepasan un sueldo mensual. Regresan los juguetes a los estantes y siguen buscando con la esperanza de poder comprar uno más accesible.
Algunas madres evaluaban la opción de comprarles una muñeca pequeña y sencilla a sus bebés para no pasar por alto el primer regalo de navidad.
Los padres se acercaban a ver los camiones de plásticos para los niños. Murmuraban que ese juguete era uno de los más accesibles años anteriores y hasta varios niños coincidían en las calles con ese regalo.
En los centros comerciales las ventas parecen estar estables. “Hace un mes ya los clientes estaban pidiendo juguetes”, comentó Rutsmar Castillo, asesora en una juguetería ubicada al este de Barquisimeto.
En el oeste los padres comenzaban a comprar algunos regalos para complacer a sus hijos.