José D. Sequera | LA PRENSA.- Sin importar la hora o las condiciones, choros no la piensan dos veces para montarse en una unidad de transporte público y robar al chófer y los pasajeros. A pesar de la gran cantidad atracos que se registran a diario, existen cinco líneas que son las que la delincuencia tiene a pan y agua.
Después de hacer una consulta al sindicato automotor y a las líneas de transporte, se determinó que las líneas más candelas de Barquisimeto son la Ruta 19, Ruta 12, Ruta 1, Ruta 13 y Ruta 5.
El delito común que se comenten en estas líneas es el robo a mano armada. El modus operandi que más repite es que dos hombres se montan juntos y si ven que el bus no está tan lleno, sacan sus pistolas y amenazan a grandes y pequeños por igual. Siempre uno está al fondo de la unidad y otro muy cerca de la entrada pendiente del chofer y amenazándolo de muerte.
“Nos dijeron que bajáramos la cabeza y no los miramos, que cuando llegaran a cada puesto les diéramos el bolso completo”, comentó Marlene García al narrar la vez que la robaron en un ruta 19 a la altura de la avenida Los Horcones, en la que dos tipos se montaron con uniformes de la GNB a robar.
Cuentan los conductores de estas cinco líneas más robadas, que sufren mucho por la delincuencia debido a que transitan por barrios peligrosos, zonas desoladas o simplemente porque llevan muchos pasajeros a toda hora y siempre tienen dinero.
Pero ahora a las víctimas no solo le quitan carteras, bolsos, celulares o comida sino que ahora los delincuentes van por los repuestos, herramientas o cualquier objeto de valor que lleve el conductor en la unidad.
Ruteros consultados admitieron que más de una vez han escuchado historias en las que grupos de tres o y hasta seis jóvenes armados amenazan al chofer y los desvían de sus rutas hasta llegar a un terreno baldío y los desvalijan.
“A un compañero de la ruta 12 se le montaron cuatro menores de edad y le desviaron hasta Chirgua 5. Mientras unos robaban a los pasajeros, otros se encargaban de robar dos cauchos, recordó José Guerrero desde su asiento.
Incluso algunos choferes revelaron que prefieren saltarse la ruta en algunos sectores en específico porque han sufrido robos seguidos en esos lugares. Tal es el caso de Guillermo Mendoza, de la ruta 5.
“Algunas veces no me meto por Fundalara y sigo derecho por la avenida Los Leones hasta Las Trinitarias, porque ya me han robado tres veces en el retorno de la autopista”, aseguró.