Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- El hecho de que nueve de cada 10 personas que participaron en las primarias del 22 de octubre votara a favor de María Corina Machado (MCM), no sólo hace que de manera unánime sea candidata presidencial en 2024, sino que se convierte automáticamente en la nueva lideresa legitimada de la oposición. Según politólogos, los resultados de este proceso obligan a un nuevo reacomodo político, donde ya el G4, integrado por los partidos Voluntad Popular (VP), Primero Justicia (PJ), Acción Democrática (AD) y Un Nuevo Tiempo (UNT), no tienen la fuerza o representatividad del pasado para enfrentar o negociar con el Gobierno.
Para Luis Salamanca, doctor en Ciencias Políticas, Machado ahora tiene el gran desafío de unir a una oposición que en los últimos años se percibía dividida y transformar el entusiasmo de la gente en una red de acción para lograr un cambio de Gobierno. La manera en cómo ha arrasado en los resultados, que hasta el lunes 24 de octubre con el segundo boletín dado a conocer por la Comisión Nacional de Primarias (Cndp), se adjudicaba 1 millón 473 mil 105 votos, hace que en este momento sea la única candidata escogida en Venezuela, cumpliendo el artículo 67 de la Constitución, que dice: «todos los ciudadanos y ciudadanas tienen el derecho de asociarse con fines políticos, mediante métodos democráticos».
«MCM ha venido construyendo paulatinamente, con coraje, valentía, con mucho valor frente a un régimen como este que la ha amenazado de todas las maneras, que le ha agredido, incluso tanto físicamente como electoralmente en su recorrido. Ha construido una opción político electoral. Logra ponerse a la cabeza de los dispersos grupos opositores y partidos políticos, por lo que comienza una nueva etapa al interior de la oposición, el reacomodo de las fuerzas. Su elección logra detener la centrifugación de la oposición», afirma.
Jesús Castellanos, politólogo y especialista en sistemas y procesos electorales, sostiene que aunque la diferencia porcentual entre los votos a favor de Machado y los que obtuvieron los demás candidatos de las primarias sea enorme, esto no representa una derrota de los partidos políticos tradicionales de oposición.
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