Osman Rojas LA PRENSA.- En una de las aceras del estacionamiento de la morgue estaba. Caminaba de un lado a otro sin levantar la vista del pavimento. Se tomaba la cabeza y se sujetaba el short. Familiares se acercaban para consolarlo y lo único que les decía: “Era un buen muchacho” y recibía abrazos.
Así estaba el padre de Rogelis Ramos Pérez (28), Médico Integral Comunitario (MIC) asesinado el jueves en la mañana en la carrera 6 entre calles 3 y 4 de la comunidad Andrés Bello, al norte de Barquisimeto.
Aparentemente, el profesional de la salud salió a comprar café y leche antes de irse a trabajar en el ambulatorio de la zona. Rogelis fue hasta una bodega que está a dos cuadras de su casa y cuando iba regreso a su vivienda un Aveo gris pasó, le disparó y lo hirió mortalmente.
“Llamó a mi puerta y yo salí. Me dijo ‘me dispararon, ayúdeme’ y busqué a vecinos para que lo llevaran al hospital. Él no era malandro, ese muchacho no se metía con nadie”, decía su vecina mientras lloraba y recordaba los últimos minutos de Rogelis.
Testigos del hecho aseguran que Ramos no fue robado. La vecina que lo auxilió comenta que el carro de donde le dispararon pasó y tras herirlo siguió su rumbo.
“Lo mataron por la política. Ese muchacho era activista social, respetado por todos porque a todos nos ayudaba. Él trabajaba con Linda Amaro y con Carmen Meléndez, coordinaba la salud en la zona y ahora está muerto”, repetía en medio del llanto.
Ramos se dedicaba a realizar trabajos sociales dentro de la comunidad. Estaba involucrado de forma directa con el desarrollo de la medicina integral en Lara, participó en la marcha de las batas blancas y en más de una ocasión fue hasta Caracas a defender la gestión de Barrio Adentro.
Marta Leal, concejal de Iribarren, lamentó la pérdida del profesional y dijo que el Cicpc se encuentra haciendo las investigaciones pertinentes para esclarecer el caso. La dirigente oficialista descartó que fuese un ajuste político, pero aseguró que hay que tomar cartas en el asunto para evitar que “la violencia siga desatada”.
La muerte de Ramos Pérez fue un acontecimiento que se dio a conocer rápidamente en el estado por medio de las redes sociales. Al mediodía, cuando los familiares del médico estaban realizando los trámites para retirar el cuerpo, las inmediaciones de la morgue estaban repletas de personas que lloraban la pérdida del joven.