REUTERS | LA PRENSA.- La destituida fiscal de Venezuela Luisa Ortega podrá entrar y salir libremente de Colombia durante los próximos seis meses mientras define su situación migratoria y hasta el momento no existe ninguna orden de captura de la Interpol en su contra, dijo el jueves el director de la oficina de migración.
Ortega, destituida por la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela, ingresó el viernes a Colombia en compañía de su esposo, el diputado Germán Ferrer, huyendo de lo que consideran una persecución del Gobierno del presidente Nicolás Maduro.
«Si no tiene ninguna orden de captura, podrá ingresar como cualquier otro extranjero a nuestro territorio sin ningún inconveniente», aseguró a periodistas el director de Migración Colombia, Christian Krüger.
«Por ahora no hay ningún impedimento. La mayoría de extranjeros que ingresa con su pasaporte al país puede estar 90 días en el territorio nacional prorrogables hasta por otros 90 días», explicó.
Ortega regresará a Colombia desde Brasil, en donde afirmó el miércoles tener evidencia de que el presidente de Venezuela estuvo involucrado en supuestos actos de corrupción con la constructora Odebrecht, a la que acusó de haber pagado 100 millones de dólares a Diosdado Cabello, uno de los hombres fuertes del Gobierno de Maduro.
El mandatario socialista anunció que solicitará a la Interpol un código rojo para la captura de Ortega por estar involucrada en delitos graves. Ortega fue destituida de su cargo el 5 de agosto como primera medida de la asamblea constituyente que gobierna Venezuela con poderes absolutos, mientras que el Tribunal Supremo de Justicia ordenó enjuiciarla.
Colombia anunció que otorgará asilo a la exfiscal, si así lo solicita. Desde su nombramiento, a finales del 2007, Ortega fue aliada del fallecido presidente Hugo Chávez, pero rompió con su sucesor y denunció al Gobierno tras meses de protestas este año que cobraron más de un centenar de vidas en medio de una profunda crisis política y económica.