EFE | LA PRENSA DE LARA.- Los efectivos de la misión de Naciones Unidas en Líbano (FINUL), entre ellos los 650 militares españoles desplegados en ese país, no realizarán de momento patrullas en la línea de separación entre este país e Israel, la denominada «Blue Line» (Línea azul).
Además, tienen restringida la movilidad fuera de sus bases, confirmaron a EFE fuentes del Gobierno español.
Estas son las limitaciones impuestas a los militares que forman parte de la misión de la ONU después de que se haya desactivado el plan de seguridad puesto en marcha con motivo de la tensión en la Línea Azul por la guerra entre Israel y las milicias palestinas de Gaza.
España tiene desplegados en Líbano 650 militares que forman parte de FINUL, la fuerza interina de Naciones Unidas para garantizar la paz en la frontera entre Líbano e Israel, que desde el pasado 28 de febrero se encuentra al mando del general español Aroldo Lázaro.
En ese contingente hay también efectivos de otras nacionalidades, entre ellos de El Salvador y Brasil.
El grueso del contingente está en Marjayún, en la base Miguel de Cervantes, donde su misión es patrullar a pie y en vehículo, para vigilar permanentemente la Línea Azul, con el objetivo de evitar situaciones que puedan conducir a una escalada de tensión entre Líbano e Israel.
La situación en la zona es «muy preocupante», según trasladó el general Lázaro al presidente del Gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, en una conversación mantenida entre ambos este lunes.
La tensión en la frontera con Israel se produce después de que el grupo chií libanés Hizbulá reivindicara este domingo un ataque con proyectiles de mortero y misiles guiados contra tres posiciones en territorio israelí, en la primera acción desde el Líbano de la guerra entre Israel y las milicias palestinas de la Franja de Gaza.
El Ejército israelí, en respuesta, bombardeó con drones infraestructura de la milicia chií libanesa Hizbulá en el sur de Líbano.
Información: EFE, Madrid, 9 oct