Agatha Reyes | LA PRENSA de Lara – La sociedad venezolana está viviendo los sinsabores de la inflación, donde el deterioro de la calidad de vida pareciera el único futuro posible ante la falta de políticas económicas de un gobierno que en 20 años sólo ha contribuido a la generación de la pobreza.
El análisis corresponde al economista Édgar Urbáez, quien precisa que al gobierno se le acabó el tiempo para generar una solución viable para Venezuela, pues a su juicio, quienes están en el poder se enfrascan en crear una generación de «mendigos» que se acostumbre a las dádivas a través del Carnet de la Patria, sin embargo, asegura que ante el caos progresivo al venezolano se le ha acabado la capacidad de aguante.
¿Por qué no hay soluciones al caos económico que hay en el país?
Por la aplicación de políticas que no son correctivas, lo que hay es una práctica abusiva de generar billetes sin respaldo, el gobierno sólo quiere una población de mendigos y dependientes de las dádivas que dan a conveniencia en todos los sectores. En lugar de generar empleo y contribuir al desarrollo del país, de levantar la producción de bienes y servicios hacen todo lo contrario y el empobrecimiento en el país y la desigualdad es cada vez mayor, la situación es muy grave.
¿Qué busca el gobierno de Maduro con la entrega continua de bonos?
Una población silenciada, que se acostumbre a recibir, pero no a generar y esto es grave porque no se puede desarrollar el país. Estamos viviendo bajo un modelo que a causa de la importación ayuda a crecer a otros países, mientras que a Venezuela la empobrece. El sueldo de los trabajadores no sirve para nada, apenas alcanza para comprar un producto, si la gente se enferma debe decidir entre comprar medicina o alimentos.
¿Puede el gobierno de Maduro solventar el caos económico en el país?
El gobierno perdió toda capacidad de recomponer el desastre que formó con mucha precisión. Ya no hay confianza y aquí se impone un cambio de modelo económico que sin duda va de la mano con el cambio político y humanista. El país requiere con urgencia entrar en una etapa de libertad, donde la producción de bienes y servicios sea primordial. El sistema debe cambiar, no hay otra salida.
¿Cuál cree que ha sido el error del gabinete económico de Maduro?
No es uno, es un compendio de errores porque no hay políticas económicas, lo que hemos visto a lo largo de estos 20 años son anuncios de medidas totalmente desconectadas de la realidad del país. Hoy la gente pasa más hambre y sufre más por la falta de políticas. Después de producir tres millones de barriles diarios de petróleo ahora no llegamos ni a 700 mil y eso es lo que nos permite tener algunas divisas, pero el pozo de divisas en Venezuela se secó; eso está resquebrajado.
Chile es protagonista de una ola de manifestaciones por medidas económicas. ¿Qué diferencia hay entre Venezuela y el país austral y esa reacción ciudadana?
No podemos comparar ambas situaciones. Sin duda en Venezuela la procesión va por dentro, en una sociedad como la venezolana no sabemos en qué momento la gente va a reaccionar. Hay un incremento desmedido de la pobreza, no hay inversión, no hay medicinas, los servicios públicos son malos. Estamos sobreviviendo sin luz, sin agua, no hay gas y eso es distinto al caso de Chile, a diferencia de ese país la economía venezolana va en franco deterioro.
¿Puede generarse una protesta de tal magnitud en el país a causa del deterioro de la calidad de vida?
Sí, eso está presente. La protesta es constitucional aunque aquí se introdujo una ley que criminaliza la protesta. La posibilidad de un levantamiento de la gente está presente porque no hay medicinas, no hay alimentos, el poder de comprar es cada vez menor, esas situaciones no son deseables, pero nuestra sociedad vive los sinsabores de la escasez.
¿Cree que el venezolano tiene capacidad de aguantar la agudización de la crisis?
La situación se agrava y la solución del gobierno es emitir dinero inorgánico, la gente ya no aguanta la crisis, vemos como jóvenes y adultos están saliendo del país, estamos perdiendo mano de obra capacitada para recuperar a Venezuela.
¿La solución está en la dolarización completa del país?
No estoy de acuerdo con dolarizar la economía, nuestra moneda es el bolívar, el gobierno debe reforzar nuestra unidad monetaria. Convertir la unidad financiera venezolana a dólar no es factible, si lo fuera los demás países lo harían, eso no es una solución porque tendríamos que seguir las políticas monetarias del Estado americano.
¿Cómo reforzar una moneda que va en constante deterioro?
La única forma de hacerlo es produciendo. Las importaciones del sector público van aumentando (las que hace el gobierno) mientras que las del sector privado van disminuyendo. Lo que encontramos en los anaqueles son productos de otros países. Eso es una desventaja porque la empresa privada que crea riqueza, sale del mercado, la empresa pequeña y mediana no pueden pagar las compensaciones del gobierno.
Luis Vicente León asegura que cerca del 50% de la economía venezolana migró a esta moneda, ¿cómo queda el bolívar?
La dolarización no es la solución. Hay es que reforzar el bolívar intentando producir más bienes y servicios de forma gradual para generar competencia. No podemos insistir en otras monedas, ya lo vivimos con el petro que fue un fracaso, incluso con el sucre que intentó implementar el presidente anterior.
¿Qué vaticina para final de año en materia económica?
Lo que veremos es la agudización de la crisis. El gobierno pinta villas y castillos, pero estamos entrando en una época donde los productos van a tomar mayor valor. A este gobierno no le queda tiempo para solucionar la crisis. Estamos en un estado de pobreza.