Osman Rojas | LA PRENSA de Lara.- La venta de películas y CD en las calles se vino abajo. Luego del primer mega apagón (el 7 de marzo) los comerciantes han visto cómo la ventas se desploman, pues ahora son extraños los días en los que venden más de 10 películas.
Problemas con la conectividad en los puntos, el precio de los discos (una película en DVD cuesta 15 mil mientras que en blu ray el precio es de 20 mil) o que ya no hay luz para que la gente se organice para ver una película en familia, son las razones esgrimidas por los vendedores quienes aseguran que las ventas han caído en un 60% en comparación con los meses de enero y febrero.
«Aquí uno tiene que ver qué hace porque no hay manera de sobrevivir. La gente pasa da una vuelta y pregunta pero no compran. Las películas que medianamente salen son las que están en el cine y eso porque las ofrecemos full menú (cambio de idiomas e imagen HD)», comenta Samuel Rojas, vendedor de películas en el centro de la ciudad.
Tan bajas están las ventas de películas en las calles que los comerciantes han tenido que ingeniárselas para poder salir adelante. Recargas de pendrive, quemas de CD personalizados o venta de chucherías son algunas de las estrategias implementadas por estos vendedores.
«La gente no quiere comprar películas porque dicen que con eso compran una harina. Hay que inventarse promociones o pasarle cadenas de mensajes a los clientes fijos para notificarles que llegaron algunos títulos (películas). Esa es la que estamos aplicando», comenta la señora Luisa Fernández, vendedora de películas en las inmediaciones del Hospital Central.& ;
El auge de portales de internet es otra de las razones que tiene ahorcadas a los comerciantes pues los más jóvenes no invierten dinero en discos sabiendo que con una buena conexión pueden ver casi cualquier película sin pagar ni un bolívar.
«En Youpelis se consiguen todas las películas que venden en los puestos quemados. Allí todas las películas se ven gratis«, comentaban algunas personas consultadas por el equipo reporteril del diario LA PRENSA.