Ágatha Reyes | LA PRENSA de Lara.- Las nuevas tarifas del Servicio Autónomo de Registros y Notarias (SAREN) son una traba para el emprendimiento privado. Así lo señala el abogado Fritz Slusnys, quien precisa que no es el estado quien debe determinar el monto mínimo para el inicio de una empresa sino los promotores tal como lo establece el artículo 248 del Código de Comercio.
El Saren publicó una resolución con fecha del 3 de julio donde establece los montos mínimos para la creación de empresa, por ejemplo, una pastelería debe iniciar el emprendimiento con un monto mínimo de 62 millones de bolívares. «Esto frena la iniciativa privada porque no se puede arrancar un negocio con un capital tan alto» indicó el también tesorero del colegio de abogados del estado Lara y coordinador regional del gremio del partido Voluntad Popular.
Slusnys señala que además de frenar a quienes intentan formalizar sus comercios, la resolución promueve de forma indirecta «la informalidad de negocios, además de la huida de los consumidores», pues explica que aquellos que no logren registrar sus empresas mantendrán la actividad sin poder emitir documentos que prueban que realizan actividades lícitas.
Aclara que como jurista no está en contra de la resolución, sin embargo considera que debe ser analizada pues no puede consolidarse como «una traba» para el emprendedor. «De que el estado debe fiscalizar para evitar que exista empresas fantasmas es aceptale, pero debe estudiar el momento correcto y no poner traba, menos ahora que cierran tantas empresas en el país producto de la crisis económica» dice.
El abogado no descarta que detrás de esta nueva medida esté la necesidad que tiene el estado de generar ingresos para tratar de cubrir el gasto público. «Economistas dicen que la economía ha bajado un 40% entonces el estado necesita hacerse de recursos para mantener sus nóminas y mantener el clientelismo político, es decir, misiones y demás.
Lamentablemente no se le ocurre una mejor idea que pechar a la iniciativa, además bajo el concepto del gobierno buscan destruir el sector privado y de esta forma quitar la posibilidad de crecer incluso a las empresas ya establecidas que deseaban ampliar su capital» indicó.