Osman Rojas | LA PRENSA de Lara.- La pesadilla no termina para los pacientes renales en el estado Lara. Una vez superado los problemas eléctricos que mantuvo en vilo a los mil 230 pacientes que hay en la región, este miércoles fue la falta de agua la que prendió las alarmas en el Seguro Pastor Oropeza y es que, según denunciaron los mismos enfermos, el camión de agua no llegó al centro médico en la mañana lo que retrasó el tratamiento de los enfermos.
«Tuvimos problemas con el cisterna que no llegaba. Gracias a Dios a eso de las 10:30 de la mañana el camión llegó y los enfermos pudieron dializarse«, explicaba Érika Pérez, paciente renal tratada en el Seguro Social y una de las defensoras de los derechos humanos que son vistos en esta institución.
De acuerdo a lo expresado por los pacientes esta no es la primera vez que los enfermos de esta unidad sufren por la falta de agua, pues la semana pasada también hubo retrasos significativos con la distribución del líquido.
«Esto es el pan diario de los enfermos que aquí son tratados. Cada vez hay más problemas en el Pastor Oropeza porque si no es el agua es la planta de ósmosis la que no sirve», dicen fuentes ligadas a la unidad de diálisis del Seguro Social.