Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- Un menor de 15 años falleció tras sufrir quemaduras en varias partes de su cuerpo, luego que un carro se incendió en el taller de su papá. El jovencito luchó por su vida por cinco días, pero el lunes al mediodía su cuerpo no aguantó más.
Se pudo conocer que el 14 de octubre el adolescente estaba junto a su papá en el taller, en Las Cuibas de Palavecino, pues en sus días libres le gustaba ayudar a su padre. Un allegado a la familia contó que ese día estaban reparando un carro, que tenía fallas con unos inyectores y cuando intentaron prenderlo, hubo un chispazo y comenzó a agarrar candela el vehículo.
Detallaron que el menor salió corriendo para tratar de apagar las llamas y se cayó, supuestamente en ese momento las llamas lo alcanzaron, pues tenía en su ropa gasolina. El joven se quemó brazos, piernas y el pecho. Juan Carlos Falcón, su padre, al intentar ayudarlo, se quemó en el abdomen.
Vecinos de la comunidad al saber lo que ocurría, de inmediato llamaron a los Bomberos de Palavecino y fueron ellos quienes los trasladaron al Hospital Central Antonio María Pineda, donde fueron atendidos por los médicos.
Una fuente policial contó que el muchacho tuvo complicaciones, pues las heridas fueron de tercer grado. Los doctores mantuvieron vendado al jovencito y le suministraron algunos medicamentos, pero tras varios días su salud se fue deteriorando y el lunes al mediodía murió, según explicó la fuente.
El cuerpo del joven fue llevado a la morgue del Hospital Central de Barquisimeto y en horas de la tarde fue entregado a sus familiares, quienes le dieron el último adiós en el sector Los Pinos de Cabudare, municipio Palavecino.
Sobre el padre del adolescente se conoció que permanece recluido en el Hospital, pero su diagnóstico es estable.
LA PRENSA trató de ubicar a los familiares del jovencito, pero no pudo ser posible, pues no se encontraban en los alrededores de la morgue.
Era jugador
Un allegado al jovencito contó que a él le gustaba jugar fútbol y pertenecía a una academia. Hace alrededor de un mes estuvo en Cubiro en un torneo.
«Era un muchacho muy sociable y alegre. Un joven que le encantaba el fútbol, todos lo conocíamos como «Falcón», comentó el allegado a la familia.
Los vecinos del joven estaban conmocionados por la muerte del joven, pues contaron que el domingo supieron que estaba estable. El joven estudiaba cuarto año de bachillerato y era el mayor de cuatro hermanos.